| Texto: J.M. Morillo-León.
Hace unos días el bar Vicente-Los Pepes se convirtió en un espacio de encuentro entre la palabra y la emoción, con la presentación del libro Al otro lado del poema, de Jesús Abelenda. Más que un evento literario, la velada fue un tributo a la fuerza universal de la poesía y su capacidad para conectar a las personas, no solo a través del arte, sino también mediante la solidaridad.
Jesús Abelenda Gómez es hijo de Rafael Abelenda Ubiña y de Ana María Gómez Fernández. Junto a sus dos hermanos José Manuel (fraile franciscano fallecido en 2020) y Milagros y su hijo Daniel, residente en Palma de Mallorca, el apellido Abelenda se perpetúa por el mundo. Jesús estudió en los colegios de San Agustín, La Salle y SAFA. Trabajó en artes gráficas en Cartonajes Tempul. Es Capiller y encargado de la Bolsa de Caridad de la Hermandad de la Humildad y Paciencia.
"A mi amigo Jesús"--escribe en el prólogo Chuchy Gago--"le ha gustado siempre escribir, quizás debido a sus idas y venidas al campo a ver las estrellas, o al simple y delicado hecho de caminar por ver lo andado. Sin embargo, un día, durante sus largas esperas de paciente, reactivé la mecha que él había encendido al decirle que tomara y cuaderno y escribiera en aquellas largas horas..."
La obra de Abelenda es un compendio de versos que trazan un mapa emocional de toda una vida. El amor, la familia, el arte y las experiencias más profundas de la existencia se convierten en los ejes temáticos de una colección que se siente tanto íntima como universal. Cada poema parece tender un puente entre lo personal del autor y lo colectivo de quienes se reconocen en sus palabras.
El autor dedica su obra "a todos los que forman parte de esta aventura que es mi vida", una declaración que resuena como un testimonio de gratitud hacia quienes han inspirado su camino creativo. Sin embargo, su obra no se limita a una mera exploración introspectiva; sus fondos destinados a la Asociación de Párkinson de El Puerto y a la Casa de La Esperanza convierten este libro en un acto tangible de generosidad.
No podemos evitar reflexionar sobre la relevancia de este tipo de proyectos. En una época donde el arte a menudo queda relegado al ámbito de lo personal o comercial, Abelenda nos recuerda que la poesía también puede ser un gesto solidario, un vehículo para el cambio y la empatía. La poesía de Jesús Abelenda, cargada de sencillez y humanidad, nos invita a mirar más allá del poema, a cruzar ese "otro lado" en el que la vida cobra un sentido más amplio y trascendente.
Un honor inolvidable