| Texto: Ángel Mendoza | Video: Daniel Marín Gálvez
Se cumplen cuarenta y cinco años desde que los legendarios Majaras, luciendo su celebrado tipo de Raza Mora, reventaron las tablas del teatro Falla con un pasodoble que habría de convertirse en todo un himno del proceso autonómico de Andalucía. En aquel febrero de 1978 España cruzaba el ilusionante, pero pedregoso, camino hacia la democracia, y la Constitución que hoy celebramos era apenas un borrador que se tejía con tiento para abrigar el futuro de un país que despertaba con mucho frío y ojos de sueño después de una infausta pesadilla.