Abandona la investigación histórica y se traslada a la Sierra de Cádiz.
| Texto: J.M. Morillo-León.
EL historiador e investigador Enrique Pérez Fernández se encuentra ante un cambio de paradigma. Abandona la investigación histórica y se traslada a vivir a la sierra de Cádiz, al municipio de El Gastor, donde pondrá en valor una casa rural: ‘El Olivo’, habiendo dejado su residencia en la urbanización ‘Las Viñas’. Deja detrás la publicación de 10 libros sobre El Puerto de Santa María, 5 en solitario, 2 en colaboración con Juan José López Amador y 3 con otros investigadores. En Gente del Puerto hemos tenido el privilegio de haber contado con su muy apreciada participación: ha sido autor de 70 nótulas, 43 en solitario y 27 en colaboración con el referido López Amador.
| Enrique, a la izquierda, en el chalet familiar de Las Viñas, donde ha vivido los últimos 35 años.
Jerezano de 1962, nacido el 13 de julio en el Barrio de Santiago, es hijo de Fernando y Luisa, ambos fallecidos; tiene un hermano mayor, Fernando, catedrático de Informática. Su progenitor, persona muy trabajadora, era empleado desde chico en las bodegas jerezanas de Valdespino. Y por las tardes, suplementaba el sueldo con representaciones alimentarias: chocolates Valor (donde fue distinguido a su jubilación), caramelos Pictolin, frutos secos…
1962
Aquel año de 1962, el año del nacimiento de nuestro protagonista, era alcalde de la Ciudad, Luis Portillo Ruiz. El profesor del Instituto Santo Domingo, Manuel Martínez Alfonso publicaba «El Puerto de Santa María en la Literatura Española». Se rodaba en El Puerto la película ‘La Becerrada’ con Fernando Fernán Gómez: la Plaza de Toros y el Vapor, espacios inmortalizados. Rafael Alberti publicaba ‘Poemas Escénicos’ primera serie.
| Viviendas de la Pescadería, en la antigua plaza del Carmen | 25 de julio de 1962 | Archivo Municipal.
Se inauguraba el Hotel Meliá ‘El Caballo Blanco’ y las viviendas de La Pescadería, hoy parcialmente derrumbadas para recuperar la plaza del Carmen. Empezaba a realizar su labor docente el Colegio La Salle que, en septiembre, inaugura el Curso 1962/63. José de las Cuevas Velázquez-Gaztelu fue el mantenedor de los Juegos Florales de la Fiesta de la Hispanidad. El poeta granadino, fallecido recientemente, Rafael Guillén, obtenía el Premio de Poesía de tema libre, en las Fiestas de la Hispanidad.
Su encuentro con El Puerto
Enrique tuvo oportunidad de pisar a temprana edad el suelo portuense, de oler la brisa marinera y de padecer el viento de Levante. Sus padres lo traían con apenas cinco años al Pinar de Coig, al Coto de la Isleta y a la playa de Valdelagrana, donde alquilaban una caseta, aquellas que, con el tiempo se pintarían de rallas azules con franjas blancas verticales.
| Enrique, en 1966, sentado en la playa de Valdelagrana, con su hermano Fernando y primos.
El primer recuerdo que tiene Enrique de El Puerto, allá por el año 1968, lo sitúa en su casa, en el jerezano el barrio de Santiago; estaba viendo la película ‘Tómbola’ protagonizada por Marisol. Su padre se le acercó y le dijo: “--Vente que nos vamos a El Puerto”. Y a El Puerto se vinieron, visitaron la fábrica de tapones Torrent, la Lonja del Pescado, la ribera… Los olores bodegueros y marineros se instalaron en su memoria olfativa para siempre.
| La playa de Valdelagrana en la década de los sesenta del siglo pasado.
Urbanización Las Viñas
Fernando, su padre, era un trabajador del gremio de la Vid y, en régimen de cooperativa un nutrido grupo de empleados de bodegas del Marco del Jerez, construyeron la urbanización ‘Las Viñas’ frente a la de Valdelagrana. Estamos a comienzos de la década de 1970. Tendrán en la casa de la urbanización portuense su segunda residencia, para vacaciones, fines de semana y veraneo. Aquella casa lindaba con el rancho del marqués de Bonanza, Mauricio González Gordon, que desapareció cuando se construyó la nueva vecindad.
| Con la dirección de Diego Ruiz Mata, equipo de la segunda campaña de excavaciones en Doña Blanca, verano de 1981. Enrique es el segundo por la derecha, de pié, junto a Ruiz Mata | Foto: Juan José López Amador.
Enrique se instaló definitivamente en Las Viñas en 1987, --era alcalde de El Puerto Juan Manuel Torres Ramírez-- tras terminar la carrera de Geografía e Historia en la Universidad de Cádiz, hasta su reciente traslado a El Gastor, hace ahora 35 años.
Yacimiento de Doña Blanca
| Con su amigo de la infancia José Antonio Ruiz Gil (hoy profesor de Prehistoria en la UCA) lavando cerámicas en Doña Blanca, campaña de 1981.
Como estudiante de la UCA participó en las excavaciones arqueológica del Yacimiento de Doña Blanca, dirigido por Diego Ruiz Mata, desde la segunda campaña de excavación, entre 1981 a 1987. Usaba entonces el SEAT seiscientes CA-40746, de su padre y algunas veces una moto de pequeña cilindrada. En la actualidad sus desplazamientos es mediante trenes, autobuses, en coches con los amigos y andando…
| Entrega de placas por el Ayuntamiento en la venta Los Álamos tras la campaña de excavación de 1982. De izquierda a derecha, Paco Giles (entonces recién nombrado director del Museo Municipal), José Luis Osborne (último propietario privado de Doña Blanca), Eduardo Pérez (concejal del PSA), José María Morillo (técnico municipal), Diego Ruiz Mata y Miguel de Santiago (concejal del PC). | Foto: Rafa.
Museo Municipal y Carta Arqueológica
| Con Paco Giles y José Ignacio Delgado ‘Nani’ en la desaparecida gravera de La Florida, 1983 | Foto: J.J. López Amador.
| Excavación en la Barriada del Pilar, la primera que realizó el Museo Municipal. Agachado, Paco Giles Pacheco. En el corte, Nani Delgado Poullet y Juan Fernández. Detrás, de izquierda a derecha, Juan José López Amador, Juan Taboada Saborizo, Javier Maldonado Rosso, Enrique Pérez Fernández, José Antonio Ruiz Gil, Jesús Montero Vítores y José López.
Su vínculo con el Museo Municipal viene desde la creación del mismo, en 1982, donde trabará una buena amistad con su primer director, Francisco Giles Pacheco; con el recientemente jubilado restaurador, Juan José López Amador, con quien ha mantenido una fructífera asociación para la investigación y producción literaria; y con Nani Delgado Poullet.
| Enrique excavando un silo en el poblado Neolítico y del Cobre de Cantarranas, campaña de 1982-83 | Foto: Nani Delgado Poullet.
| Prospección con sondeo en el yacimiento romano y visigodo de El Barranco, junto a la laguna Salada, con Paco Giles, Jesús Montero, Juan José López y José Antonio Ruiz. | Año 1983 | Foto. Nani Delgado Poullet.
| En la laguna Salada con Juan José López Amador y Nani Delgado Poullet, artífices ambos del ‘Proyecto Salvar las Lagunas’ que propició su protección y declaración como ‘Complejo endorreico de El Puerto de Santa María’.
Participa en la elaboración de la Carta Arqueológica del término municipal de El Puerto de Santa María, así como en diferentes excavaciones.
Publicaciones
Ha publicado más de 150 trabajos de investigación histórica en revistas especializadas a nivel nacional, autonómico y local. Aún recordamos sus artículos en la edición local de Diario de Cádiz, en la sección dominical ‘Puerto Escondido’, durante los años 1994 y 1995.
En la desaparecida Revista de Arqueología publicó, junto a López Amador y José Antonio Ruiz Gil, diversos artículos divulgativos sobre las Canteras de San Cristóbal, las Alquerías Mediavales en la campiña portuense y otro sobre Portus Gaditanus, ciudad romana donde hoy se encuentra el actual El Puerto de Santa María.
Libros
Enrique Pérez ha publicado 10 libros entre 1997 y 2021, sólo o en compañía de otros, que relacionamos por orden cronológico. A partir de 2002 estuvo una década sin investigar ni escribir, regresando en 2012. Tiene pendiente de terminar un libro sobre la historia de El Puerto: ‘El Marqués de la Cañada y su Gabinete de Antigüedades'.
De Enrique Pérez escribió el colaborador de Gente del Puerto, Luis Suárez Ávila, recientemente fallecido, “Enrique Pérez Fernández, entrañable amigo, historiador tenaz y enjundioso, revividor de situaciones y espacios, regenerador de muchas nostalgias propias y ajenas y, pese a su juventud, autor de muchos artículos, ponencias, comunicaciones y libros que tienen el denominador común de ser imprescindibles. Cada tema que toca Enrique lo ha hallado virgen. Tiene esa virtud y esa agudeza.”
‘Puerto de Santa María ilustrado y compendio historial de sus antigüedades (1764)’ edición y estudio de Manuel Pacheco Albalate y Enrique Pérez Fernández. Biblioteca de Temas Portuenses. Ayuntamiento de El Puerto de Santa María. Impreso en Bollullo. EPSM (El Puerto de Santa María). (1997) ISBN 84-89141-14-2 522 págs. +info
De esta obra han bebido muchos historiadores locales posteriores a Anselmo Ruiz de Cortázar. Más de un siglo ha tenido que transcurrir para sacar al verdadero autor del olvido, Ruiz de Cortázar, demostrando que la persona a quien se atribuía, el archivero Juan Miguel Rubio de Espinosa, no pudo ser ya que nació en 1768, cuatro años después de que Ruiz de Cortázar concluyera su obra.
‘Aportaciones al proceso histórico de la Ciudad de El Puerto de Santa María. La intervención arqueológica en la Plaza de Isaac Peral’. Edición de Juan José López Amador. Artículo de Enrique Pérez Fernández. Impreso en Puertograf. EPSM. (1997) ISBN 84-605-6096-1. 142 págs. +descargar libro en pdf
‘Tabernas y bares con solera. Una historia de la hostelería en El Puerto de Santa María’. Primera Edición. Enrique Pérez Fernández. Hospor. Impreso en Puertograf. EPSM. (1999) ISBN 84-605-9610-9 240 págs.
Evocación de viejas tabernas, tiendas de montañés, cafés, bares y restaurantes portuenses de antaño, los que existieron entre el último tercio del siglo XVIII y la mitad del XX, subsistan hoy o no; aquellos establecimientos del gremio de la hostelería por los que el tiempo pasó dejando entre sus paredes un poso de solera, un grato recuerdo a los parroquianos que los vivieron y una manera de ser de aquí. Recogen historias cotidianas, populares, que forman parte de la memoria sentimental de las generaciones mayores.
‘Formaciones sociales agropecuarias en la Bahía de Cádiz. 5000 años de adaptación ecológica en la Laguna del Gallo. El Puerto de Santa María. Memoria Arqueológica de Pocito Chico I. 1997-2001’. Coordinadores José Antonio Ruiz Gil y Juan José Lopéz Amador. Capítulo XI. ‘Pocito Chico-Grañina en la documentación escrita siglos XIII-XX’ Enrique Pérez Fernández. Editorial Arqueodesarrollo Gaditano. Impreso en Gráficas Santa Teresa. Sanlúcar de Barrameda. (2001) ISBN 84-607-2533-2 348 págs. +descargar libro en pdf
‘El Vergel del Conde y el Parque Calderón. Historia de dos paseos de El Puerto de Santa María’.Enrique Pérez Fernández. Ayuntamiento de El Puerto de Santa María. Biblioteca de Temas Portuenses. Impreso Santa Teresa Industrias Gráficas. Sanlúcar de Barrameda. (2001) ISBN 84-891141-34-7 504 pgs. +info
En el volumen se recogen la historia de dos señeros paseos portuenses, dividido en tres partes, en la que su autor realiza una rigurosa y minuciosa investigación. En la primera trata los antecedentes del solar que ocuparon, la fundación de ambos paseos y de las sucesivas reformas que tuvieron. En la segunda, el autor los sitúa en su entorno inmediato con el que formaban un todo. En la tercera parte se habla de las ferias, veladas y actividades lúdicas que llenaron de vida su suelo.
‘El Puerto Gaditano de Balbo. El Puerto de Santa María. (Cádiz)’. Juan José López Amador y Enrique Pérez Fernández. Ediciones El Boletín. Impreso en Tórculo Artes Gráficas. Cádiz. (2013) ISBN 978-84-940428-4-3. 222 págs. +descargar libro en pdf
El Portus Gaditanus fue el puerto romano que Gades creó a fines del siglo I antes de nuestra era en el solar donde se levanta el casco histórico de El Puerto de Santa María. Su finalidad, canalizar por vía marítima la producción salazonera y agrícola de las fértiles tierras y costas que median entre las desembocaduras del Guadalete y Guadalquivir. Su fundador fue el gaditano Lucio Cornelio Balbo ‘el Menor’, en el año 19 a.d.C. que a la vez mandó abrir en las arenas, a pico y pala, la actual desembocadura del Guadalete, el que denominan "Canal de Balbo"
‘Tabernas y bares con solera. Una historia de la hostelería en El Puerto de Santa María’. Segunda edición corregida y aumentada. Enrique Pérez Fernández. Ediciones El Boletín. Impreso en Martínez Encuadernaciones A.G. Puerto Real. (2014). ISBN 978-84-943483-0-3 333 págs. +info
Más de 300 páginas para una investigación que se extiende de 1750 a 1975 en la que se refieren más de 500 establecimientos, con la información que aportan 217 fotografías. “Me he enfrentado a un ámbito quizá no muy considerado en la historiografía, más atenta a la política o la economía y menos al aliento de lo cotidiano”.
‘De El Puerto a Cádiz. Los barcos del pasaje en la Bahía de Cádiz (siglos XV-XXI)’. Enrique Pérez Fernández. Ediciones El Boletín. (2017). ISBN 978-84-946248-4-1 409 págs. +info
Cuando se hundió el Adriano III en el verano de 2011 concluyó la penúltima etapa de los ‘barcos del pasaje’ en El Puerto de Santa María y Cádiz (y viceversa). Una historia prolongada --en lo que las fuentes documentales permiten conocer-- desde fines del siglo XV, si bien sus orígenes se remontan al siglo I antes de nuestra era, cuando Balbo ‘el Menor’ fundó en la tierra firme frontera a Gades ‘El Puerto Gaditano’. Este volumen recoge --en su mayor parte-- la historia de faluchos, los vapores y la saga de motonaves ‘Adriano’ que durante 500 años surcaron las aguas de la Bahía de Cádiz trasladando de una a otra población a sus habitantes y visitantes, ilustrándose el texto con los testimonios de numerosos viajeros y afamados escritores que vivieron las travesías.
‘El Coto de la Isleta y Valdelagrana. El Puerto de Santa María. Geohistoria de un espacio entre el mar y las marismas’. Enrique Pérez Fernández. Ediciones El Boletín. (2018). ISBN 978-84-947386-4-7. 285 págs. +info
Hace cinco mil años su espacio lo ocupaba por entero el agua de la antigua Bahía de Cádiz, hasta que comenzaron a aflorar (4500-4200 años) sus primeras tierras formando una barra litoral que taponó el antiguo estuario, convertido en un lento proceso en marismas. Rodeado por el mar, las marismas y los cursos del Guadalete y del San Pedro, fue un terreno, durante milenios, apenas habitado, salvo por una comunidad de la Edad del Bronce que se asentó en el lugar, de forma estacional, hace unos 3700 años. En tiempos romanos, una calzada -la Vía Augusta- cruzaba su suelo de punta a punta, cuyos vestigios han perdurado hasta nuestros días. Durante más de cinco siglos fueron tierras propias de los condes y duques de Medinaceli, los señores jurisdiccionales de El Puerto, y por último, como herederos de ellos, de los condes de Valdelagrana, que explotaron sus limitados recursos en beneficio propio. No fue hasta mediados del siglo XX cuando comenzó la historia del Coto de la Isleta y Valdelagrana de nuestro tiempo: su ocupación urbanística y turística, que cambió, como en ningún otro momento, la vida de estos parajes entre el mar y las marismas.
‘El Puerto de Santa María en el siglo XIII. La repoblación de Alfonso X: De Al-Qanatir a Santa María del Puerto’. Enrique Pérez Fernández y Juan José López Amador’. Ediciones Suroeste. (2021). ISBN 978-84-122907-4-5. 525 págs. +descargar libro en pdf
Sucesor del Portus Gaditanus que a fines del siglo I a.C. fundó Lucio Cornelio Balbo ‘el Menor‘ y del Portum tardorromano, bizantino y visigodo, la aldea andalusí de al-Qanatir nació a mediados del siglo X como población y puerto fluvio-marítimo dependiente de Saris (Jerez), prolongándose su historia hasta 1260, cuando pasó a manos castellanas en el marco de la conquista del valle del Guadalete que emprendió Alfonso X.
| Enrique Pérez y Juan José López, en la puerta del Castillo de San Marcos, con el libro'El Puerto de Santa Maria en el siglo XIII'.
El Libro del Repartimiento que ha llegado a nuestros días, que es una copia parcial y desgajada del original de Cádiz y su término, recoge los nombres y las propiedades urbanas y rurales repartidas a los repobladores que se asentaron en la villa y su alfoz en 1268. Una detallada lectura del documento ha permitido a los autores reconstruir cómo era la fisonomía de la postrera aldea andalusí y cómo se conformó, siguiendo las directrices marcadas por Alfonso X, la nueva villa, ubicándose en su espacio cada casa y solar repartidos, así como los espacios públicos y los inmuebles más destacados: el recinto murado de la población, las calles y plazas, el zoco, el palacio del rey, la alhóndiga, la aduana, el corral del concejo, el Pozo Santo… Y sobresaliendo de ambas culturas, la mezquita de al-Qanatir y la fortificada iglesia-santuario con la advocación de Santa María del Puerto, tan presente, con su Cancionero propio, en las Cantigas alfonsíes.
| Asistentes a la presentación del libro 'El Puerto de Santa Maria en el siglo XIII', en el Castillo de San Marcos | 23 de agosto de 2021.
Ampliamente se trata, en lo que las fuentes documentales y la arqueología permiten conocer, de las once alquerías andalusíes y sus tierras que se distribuían por el actual término portuense, y de su reparto tras la conquista cristiana. Y se estudian los principales hitos históricos que tras la repoblación vivió la villa para convertirse en un señorío. En suma, en este volumen se rememora, prestando especial atención a las huellas de lo material y tangible, la historia de quienes protagonizaron, en una época de conflictos y enfrentamientos armados, la gran “aventura” de la conquista y repoblación de El Puerto de Santa María durante el apasionado y apasionante siglo XIII.
En la próxima entrega, incluiremos un índice con enlaces de las 70 nótulas de Enrique Pérez Fernández en Gente del Puerto, 43 en solitario y 27 escritas a cuatro manos con Juan José López Amador.
Buen vecino, scout y amigo. Suerte!