| Texto: Daniel Marín Gálvez.
Andaba yo por los 12 años cuando nos expulsaron del colegio a Miguel Peinado y a mí. Yo nunca entendí que habíamos hecho de malo (ahora creo que fuimos los cabezas de turco de un problema de fracaso general). Con la maleta y el mono del taller de ajuste sin saber muy bien que hacer y el temor de llegar a casa nos fuimos para el futbolín del Pato y nos fumamos un bisonte a medias que el Miguel tenía guardado y hacer tiempo para llegar a casa a la hora de salida del colegio.
Yo no sé Miguel, pero yo estaba cagao cuando llegué a mi casa y le dije a mi madre y mi abuela (le temía más a mi abuela) pero esta vez los 'babuchazos' llegaron sincronizados. “--Y ahora deja que venga tu padre, que te vas a enterar. Métete en el cuarto y no salgas de ahí hasta que llegue”.