| Texto: M. Valero.
"Arte, color y mucha alegría". Así presenta su trabajo Fernando Quirós en su red social de Instagram, un 'escaparate' virtual lleno de sus atunes de colores. "Mi padre ha pintado siempre y mi abuelo también pintaba, pero en plan hobby. Nunca me había dado por la pintura, lo tenía en casa pero no me daba. En mi trabajo en una sastrería de torero hice algún diseño geométrico, pero con la llegada de la pandemia por el coronavirus el toreo se paralizó", cuenta Quirós.
Poco antes de que el mundo se quedara encerrado en sus casas por el Covid-19, Fernando visitó a una amiga. "Tenía un par de cuadros colgados y como tengo confianza, le dije que eran horrorosos. Se los habían regalado y no sabía qué hacer con ellos. Le dije que si me los daba para darles una vuelta. Los pinté con mucho color y le encantaron. Me regaló un lienzo", recuerda.
En el nuevo lienzo pintó un fondo del mar con muchos peces. Lo vendió. Y con lo que ganó, compró otro lienzo y llegaron sus primeros atunes. "Me lo compraron y el dinero volví a invertirlo en material... y así he ido creciendo", añade el artista.
| Tabla de surf pintada con atunes azules y turquesas para una vivienda de San Cugat
El niño que no le llamaba la atención la pintura se ha convertido en un hombre que no deja de pensar en pintar: "Durante el confinamiento me levantaba y me acostaba pintando. Los envíos de lienzos iban bien, por las redes sociales me veían, me encargaban y casi que vendía un cuadro diario durante la pandemia. Además, todos los viernes que estuvimos confinados sorteaba un cuadro". Los atunes comenzaron a inundarlo todo.
Marca de ropa
De los lienzos pasó a la ropa. Su marca ha ido creciendo como el mar de peces que envía con sus obras. "Hice una camiseta para mí y mi entorno con el dibujo de mi atún. Lo puse en redes y me lo pidieron. Después diseñé sudaderas. Una amiga, que va en silla de ruedas, me pidió una de un atún con silla. Lo dibujé simulando la silla de mi amiga y le encantó", declara. A partir de ahí comenzó a pintar atunes "con diferentes discapacidades y los presenté a Chárbel".
Discatunes: atunes con discapacidades
| Fernando Quirós mostrando una camiseta de un 'Discatún' con implante coclear.
Los 'Discatunes' enamoraron a todos y han permitido realizar varias acciones solidarias para recaudar fondos en colaboración con el Instituto de Rehabilitación Neurológica Charbel, con el objetivo de cubrir el tratamiento de rehabilitación de pequeños que han sufrido ictus pediátrico y carecen de los medios para costeárselos. 'Discatunes' incluye productos como camisetas, sudaderas, bolsas de tela, tazas y llaveros con los diseños realizados por Fernando Quirós. De la mano del chef Ángel León también los presentaron a Inocente Inocente y recaudaron 10.000 euros para niños con necesidades.
"Paralelo a mis pinturas he seguido haciendo obra social. Soy muy solidario y me gusta decirlo. Entre otras cosas he hecho un libro con el Hospital de Jerez para que dibujen los niños. También organicé un ronqueo solidario en Chiclana, yo pinté cinco cuadros para un sorteo y el menú lo creó el chef de la Selección Española", explica Quirós.
A su estudio acuden muchos niños y jóvenes con discapacidad para disfrutar pintando como terapia y fomentar las relaciones sociales. "El 19 de noviembre organizo en Puerto Sherry el primer encuentro de pintura infantil solidario con tres asociaciones con discapacidad", adelanta el artista. Además, está a la espera de cerrar con el Hospital de Jerez una bonita actividad con los niños hospitalizados: "Quiero llevar un poco de color a su estancia en el Hospital. Creo que puede ser muy bonito y al menos ese día será mucho más ameno para ellos". | Fuente: Diario de Jerez.
Otros diseños de Fernando Quirós, también en abstracto, son cinturones, zapatillas de esparto, zapatos deportivos, e incluso un coche tuneado, el modelo 550 de la marca Fiat, que bien podría ser el modelo 'Colores' si la compañía automovilística se fija en la obra de Fernando Quirós.
| Fiat 550 'Colores' tuneado por Fernando Quirós.