Texto: Jesús Lavi y Juan Lorenzo Castro [*]
Pronto se cumplirán cuarenta años, triste aniversario, de la desaparición entre llamas y humo negro, del Teatro Principal de El Puerto de Santa María. A punto de cumplir su 140 aniversario, el vetusto teatro [construido en 1845 por Críspulo Martinez] desapareció antes de tiempo del callejero portuense, dejando tras de sí un descampado enviudado que pronto empezaría a ser considerado un basurero, para después dar lugar a una entidad bancaria.
| Teatro Principal en 1930 | Foto: Centro Municipal de Patrimonio Histórico.
| El Teatro Principal en una imagen de los años 40 del siglo pasado.
El fuego se llevó una hermosa arquitectura, adornos, elementos preciosos que nos hablaban de una época de esplendor en la economía de la bahía. Un edificio clave para entender la historia y la sociedad de nuestra ciudad. Pero también se llevaba los olores del tapizado añejo, el crujir de los viejos maderos bajo los pies ansiosos de escolares agolpándose para coger el mejor asiento. Entre los resquicios del suelo, cáscaras de las pipas que salaban los dedos de los espectadores, afanados estos por darle gusto a la boca y a los ojos con los entremeses del Bar ‘La Concha’ y con los espectáculos: teatro, pero no solo, también cine, zarzuelas, concursos de baile y de carnavales.
| Actuación de Rondalla el 10 de octubre de 1962.
Muchos fueron los protagonistas que se movieron en ese teatro, no solamente lo fueron los actores como dueños del escenario, sino portuenses anónimos, coqueteando protegidos por la penumbra, alejados de los focos. Niños que, con el corazón batiente, se colaban, para ver su película favorita y tantos de nosotros que nos hemos sentido parte de la obra cuando esta llegaba a su clímax y tocaba reír, o llorar, personajes vivientes con máscara de actor.
| Postal circulada el 18 de octubre de 1904
Son todas estas historias, todas estas emociones lo que buscamos rescatar. La excepcional historia del teatro del puerto, un largo camino empedrado con nombres y apellidos de la talla de Rafael Alberti o Pedro Muñoz Seca. Una tradición de la que El Puerto puede y debe sentirse orgulloso. Una tradición que debe ser valorada y enriquecida en los años por venir. Pero también una memoria ligada a la tradición, y esta memoria la formamos todos, los y las portuenses. El teatro forma parte de El Puerto, del mismo modo que El Puerto forma parte del teatro.
| El derribo 1.
| El derribo 2.
Por todo esto los autores del trabajo, preocupados por la preservación de la historia de nuestra Ciudad, nos hemos propuesto servir de hilo conductor para unir la gran historia del teatro portuense con las historias íntimas de los portuenses con el teatro. Y, teniendo como horizonte una fecha tan señalada como la del 40 aniversario del incendio del Teatro Principal, hemos comenzado a realizar una amplia investigación que abarca desde archivos locales y nacionales, públicos y privados, así como los testimonios orales de los vecinos que vivieron lo que fue el Teatro Principal de El Puerto y lo que supuso para ellos.
Buscando subsanar una deuda con la cultura de nuestra Ciudad hacemos una llamada de atención a los y las portuenses, que quieran dar su aportación, su particular testimonio, para que se pongan en contacto con nosotros y tomen un lugar en la historia y en la memoria de nuestra Ciudad.
[*] Jesús Lavi es director de teatro y Juan Lorenzo Castro es historiador.