La historia de Joaquín y Lucía es una historia de amor y superación. De esas en las que se rompen barreras y en las que el amor todo lo puede. Comenzaron su relación en septiembre del año pasado en plena pandemia por Covid. Él había sido derivado a una clínica de neurorehabilitación de Jerez de la Frontera para continuar con su tratamiento. Sufre una lesión medular que lo mantiene en silla de ruedas por un accidente laboral sufrido en enero de 2020.