Todos recordamos a José Roque Morales Augusto, como una persona afable que daba soluciones a cuantas consultas le hacían en la droguería de toda la vida. Hoy las resuelven sus hijos. Pero… lo estaban esperando en el Más Allá, parece ser, para solucionar unos problemillas en las Puertas del Cielo…
un hombre bueno de verdad