4.217. Juan Manuel Neva García. Ex presidente del CRAP

Juan Manuel Neva García nace en Sanlúcar de Barrameda, el 27 de agosto de 1926 en la calle Mesón Duque del Barrio Alto y reside hoy, a los 93 años en su casa de El Puerto de Santa María, ciudad donde ejerció su vida profesional como empleado de banca, en el Banco Hispano Americano; y luego Banco Central Hispano, hoy Banco de Santander, en la esquina de las calles Larga y Luna. Fue presidente del Club de Rugby Atlético Portuense entre 1978 y 1982.

| Foto de los padres de Juan Manuel y de él con algo menos de un año.

Sus padres eran Manuel Neva Bejarano y Rosario García Merlo, siendo el primogénito de siete hermanos: Juan Manuel, Regla, Charo, José Manuel, Pepa, Manuel y Carmen. 

1926 
En 1926 era alcalde de El Puerto, Alfonso Sancho Mateos.   En España se produce la intentona de golpe de estado militar contra la Dictadura de Primo de Rivera, conocido como “Sanjuanada” por el desastre organizativo y de apoyos que tuvo y que estaba previsto para el 24 de junio, día de San Juan. Curiosamente este pasó a ser el día de su onomástica. 

Aquel fue el último año de un periodo que empezó en 1923 durante el cual en  El Puerto de Santa María la mayor causa de mortalidad la produjo la tuberculosis, que llegó a producir un total de  217 defunciones  y un importante debate médico, al superar con creces el porcentaje de mortalidad específica, para llegar a la consideración de epidemia.

Hipólito Sancho publicaba, junto a Rafael Barris su libro ‘El Puerto de Santa María en el Descubrimiento de América’. Ese año, con la participación de las mejores escopetas de España y la asistencia de S.M. el rey Don Alfonso XIII, se tiró en nuestra Ciudad la Copa de España. La temporada taurina se inauguraba el 4 de julio con una novillada de la ganadería de Antonio Peñalver (antes Domecq) con Rayito, Gitanillo de Triana y Enrique Torres ‘Niño del Seguridad’.

Volviendo a nuestro protagonista, cuando tenía 4 años, su padre vendió 4 aranzadas de viñedos que poseía en Sanlúcar y se trasladaron a El Puerto y montó una panadería en la calle Ganado llamada ‘Los Sanluqueños, lo que hoy es la panadería confitería ‘La Merced’, aunque aún muchos la llaman por su primitivo nombre. Durante ese periodo vivieron en diferentes hogares en las calles Zarza, Cruces y Cantarería y estudió en el conocido, entonces, colegio de Juan Pinto situado en la calle Melero. 

| Comida de compañeros de trabajo del Banco Hispano Americano. Fila superior, de izquierda a derecha, Ramón Matiola Gutiérrez, José Fernández Gutiérrez, Antonio Ortega García, Juan Neva García, José Luis Gallardo Poullet, Juan de Dios Mesa González, Antonio Fajardo Díez, José Luis Mesa González, Francisco González Rivera, Juan Roselló Castell, Agustín Silonez Villaverde director de la entidad, José Sánchez Sánchez, Domingo Roa Duvige, Eduardo Cossi Aboza, Fernando Polanco Sierpes, y Juan Gallardo Poullet; fila del centro, Guillermo Jiménez Rodríguez, Emilio Ramírez Bermejo, Francisco Pérez Vázquez y Andrés Díaz Gómez; fila siguiente, Santiago Castilla Robredo, Manuel Romero Rivas, Manuel Alvaro Campo, Manuel Monje Alonso, José Rodríguez López, Plácido Romero Rivas y Francisco Guerrero García; fila inferior, Antonio García Brotons, Guillermo Jiménez Rodríguez y Antonio Barragán Rodríguez.

En 1934, su padre Manuel, vende la panadería y regresan a Sanlúcar, donde estudia en el colegio de los Hermanos de la Doctrina Cristiana de La Salle hasta que en julio de 1936 comienza la Guerra Civil. Al finalizar la contienda, regresan a El Puerto y se instalan en la calle Postigo, justo frente a la histórica fábrica de harina de Esteban Fernández Rosado, hoy llamada “El Vaporcito”. Con 14 años toma la decisión de ingresar en el noviciado de Griñón (Madrid) para hacerse hermano de La Salle, donde estuvo sólo dos años. Regresa a su casa y empieza a preparar las oposiciones para empleado de banca, en el colegio Luis Poullet en la calle Cruces. Inicia su vida profesional como bancario en el Banco Hispano Americano a la edad de 16 años, en el que estuvo hasta su jubilación en 1986.

| Juan, durante el servicio militar.          

En 1947 es reclutado para realizar el Servicio Militar durante dos años, estando destinado en Sevilla en el Cuartel de la Plaza de la Gavidia, continuando su trabajo para el BHA desde Sevilla por las tardes.

| Luna de Miel de Juan y Antonia.          

El 2 de agosto de 1954 contrae matrimonio con Antonia Delgado Salas en la Iglesia Mayor Prioral. Se da la curiosidad, ahora, que la novia, Antonia, se casó vestida de negro debido al riguroso luto que se mantenía entonces a los difuntos y que ella estaba cumpliendo por el fallecimiento, por padecer la fiebre de malta, de su padre. 

Instalaron su residencia en la calle Larga 106, frente al entonces Banco Hispano Americano, en un piso encima del local donde empezó la, hoy famosa, heladería Soler. Ahí nacieron sus tres primeros hijos: Juan Carlos, Santiago y Francisco Javier. Pudo haber otro primogénito de no ser por complicarse su nacimiento, falleciendo a las cuatro horas de nacer. En 1960 compra una parcela en el Pago de La Valenciana, donde construye su vivienda, en la hoy llamada calle Generalife, donde nacen el resto de la familia María Antonia, Macarena y Jesús. Este último el único que nació fuera del hogar, en un hospital 

| Antonia, durante una actuación de teatro.          

El largo noviazgo, que duró 10 años, tuvo muchas anécdotas y curiosidades. Una de ellas fue que a Antonia le gustaba enormemente el teatro y formaba parte de una pequeña compañía que ensayaba y actuaba en el desaparecido Teatro Principal. Juan iba a todos los ensayos y actuaciones con tal de verla, incluso tuvo un diminuto papel, en el que tan sólo decía una frase, en una obra de Pedro Muñoz Seca llamada “El Rayo”. Allí entabló amistad con José Morillo, recordado locutor de Radio Puerto, siendo espectador de excepción en la última representación que hicieron juntos José Morillo y Antonia Delgado,  “La Venganza de Don Mendo”. 

| Entrenando.          

Entre sus aficiones está la huerta, la caza y el deporte. Practicó ciclismo y fútbol. En aquellos años existían en El Puerto tres equipos: El Español, La Gimnástica y El Racing. Juan Manuel jugaba en el primero. Se jugaba en los dos campos de juego que existían entonces entre la antigua Fábrica de Botellas VIPA y la playa de La Puntilla, aunque su equipo tenía que entrenar en la Plaza de Toros.

| Fotografía con su nieto Carlos Neva, jugador del Granada C.F.       

El matrimonio, sobre todo Antonia, era muy devoto de la Virgen del Rocío, formando parte de la Hermandad del Puerto. Debido a ello y a sus conocimientos profesionales de la banca, en 1962 formó parte de la Junta Directiva de esta Hermandad con el cargo de Tesorero.

Los niños cursaron sus estudios, hasta el primer ciclo de bachillerato, en el Colegio de los HHDDCC de La Salle. Las niñas, lo hicieron en el Colegio de Monjas del Asilo, de la Congregación Hijas de la Caridad, de la calle Cielo. Juan, muy comprometido de siempre con la Institución de La Salle, colaboró en la constitución de la Asociación de Padres de Familia de este colegio, participando en la redacción de sus Estatutos y formando parte, cómo Tesorero en su primera Junta Directiva.

|Foto de entrega de la insignia de oro del CRAP

Sus tres hijos mayores: Juan Carlos, Santiago y Francisco Javier, fueron jugadores de Rugby por lo que se vinculó mucho al CRAP (Club de Rugby Atlético Portuense), llegando a ser presidente de la entidad entre 1978 y 1982, después de que su primer presidente y fundador, Esteban Fernández Llópiz, cesara de su cargo y de cuyas manos recibió la insignia de oro del club. 

El matrimonio, a lo largo de su vida, siempre estuvo implicado y comprometido con instituciones y acciones de carácter social y humanitarias. También desarrollaron actividades deportivas y culturales, algo que transmitieron a sus hijos y nietos que continúan con este legado de compromiso social, deportivo o artístico. El canto, teatro, baile flamenco, pintura, fútbol, rugby, baloncesto, montañismo o esquí no son actividades extrañas en esta numerosa familia

| Foto familiar de la comida de Navidad de 2019          

Enviudó el 19 de diciembre de 2015 y en la actualidad disfruta de todos sus hijos, 13 nietos y dos biznietas y a sus 93 años mantiene un estado de salud, vitalidad y optimismo envidiables y dignos de admiración y que transmite a toda la familia.