Después del ‘varapalo’ sufrido en el concurso, había que poner la carne en el asador de nuevo y jugársela a una sola carta, “o se triunfa o para casa”. Esa fue sin duda la frase que se pronunciaría antes de comenzar los ensayos de esta agrupación, así que de nuevo encorajinados con el resultado anterior y con la mala critica que había en la calle, (inmerecidas a todas luces), se arriesgaron y apostaron por un tipo muy complicado, pero que se demostró con el tiempo que de nuevo dieron con la tecla y consiguieron otra vez el Primer Premio.
Este grupo sufrió algún que otro cambio y en principio no salían algunos de sus componentes como Francisco Gómez Ortega ‘Pacoli’, José Antonio Cía Leiva ‘Taly’, Paco Soto Ruiz, Pedrito García Garrido y José Torres Palomeque ‘Porra’. El primero definitivamente volvió a unirse al grupo, pero los tres últimos optaron por incorporarse a la comparsa de José Luis Arniz, que por aquel entonces ensayaba en la bodeguita de Merello, situada en la calle Santa Lucía, y que llevaba por nombre ‘Cuba’ donde, precisamente, el que escribe era uno de sus componentes.
Por lo tanto el grupo quedo formado por Manuel Albaiceta, Francisco Mel Segarra, Francisco Mendoza ‘el Chino’, Joaquin Albert Gálvez, Juan Antonio del Pino Suárez ‘el Loro’, Francisco Díaz García ‘Pelahigo’, Diego Caraballo Blanco, José María, Francisco Gómez Ortega ‘Pacoli’, Fernando Albert Gálvez ‘Nando’ y José Antonio Rico Segura ‘Pedro de Los Majaras’.Cabe destacar como anécdota curiosa, que de “cajilla” iba Manuel Albaiceta Revuelta, en ausencia de Francisco Soto Ruiz. Eso demuestra la capacidad y el arte de este personaje.
| Cassette de Izquierdo Producciones.
El año se presentaba en teoría muy reñido por la competencia de estas dos grandes comparsas de El Puerto y por lo que salía en Cádiz (que no era poco), y doy fe que de la teoría se pasó a la practica y el concurso no dejo a nadie indiferente por muchos motivos que no vienen al caso, porque la sección esta dedicada al Corral-Lavadero, de donde tantas y grandes comparsas salieron de allí y que luego pasarían a la historia.
Algún día contaré con pelos y señales la verdadera historia de lo ocurrido dentro y fuera del Teatro en esos días, porque lo viví y sufrí en primera persona, ya esta bien de contar lo que pasó ese año con falsos argumentos de personas que ni siquiera estuvieron allí, seguro que quedaríais muy sorprendidos.
Volviendo a lo que fue el año de ‘Los Simios’ hay que decir que cuando abrieron cortinas, a nadie sorprendió las voces tan potentes que llevaban, pero cuando esos tíos se volvieron para el publico interpretando el tipo tan maravillosamente bien, aquello fue un escándalo, sobre todo en la segunda función, donde tuve la oportunidad de escucharlos desde la calle calentando voces en los camerinos donde interpretaron dos pedazos de pasodobles con las letras de Diego Caraballo, que otra vez volvió a demostrar que sabia llegar y tocarle la fibra a la gente y ponerles los pelos como escarpias. Después lo tacharían de que escribía pasodobles de pena, pero al final muchos son los que han intentado seguir su estela sin obtener el mismo resultado, si no que se lo pregunten a muchos autores que en su momento lo criticaron, ¿o no, señores?.
| Desfilando por las calles de Cádiz.
Entre el triunfo conseguido y lo que ya arrastraban de años anteriores, para la gran mayoría de aficionados y aficionadas al Carnaval llegaron a convertirse en un verdadero icono de nuestra fiesta y seguían arrasando por todos los sitios donde eran requeridos, eso sin menospreciar a las grandes y buenas agrupaciones del momento, sobre todo de la capital.
Así se fue agrandando cada vez más la leyenda de esta agrupación, de la que ya formaban parte un gran número de componentes, que salían y entraban, pero que nunca dejarían de pertenecer a esta interminable y gran familia de ‘Los Majaras’.
Como dije anteriormente el año dio para mucho, tanto que daría para muchísimo mas, pero no creo que sea el sitio ni el momento de contarlo con todo detalle, seguramente si hubiese estado dentro de ese grupo hubiese contado alguna que otra anécdota interesante o graciosa pero no fue el caso y por eso solamente intento dar una pasada sobre lo que fueron estas grandes comparsas, que tantas alegrías le dieron a su El Puerto de Santa María. | Texto: Manuel Palma Leiva.