La suerte quiso en enero de 1997 que una mujer de 76 años, [la madre de el popular ‘Papi’], aficionada a los juegos de azar, pero desconocedora de la marcha de la Liga y las técnicas empleadas por los entrenadores de fútbol, resultase propietaria del único boleto con 14 aciertos de la quiniela, dotado con 308.175.654 pesetas. Josefa Sánchez Sevillano, entonces vecina de la popular Ribera del Marisco de El Puerto de Santa María, había decidido repetir en esta ocasión la misma combinación que su hijo Juan le había marcado para la semana anterior. De esta manera, ajena a las sorpresas del Barça y del Madrid, consiguió el premio más importante de 14 aciertos repartido por Loterías y Apuestas del Estado en toda la historia de la quiniela, según una nota difundida por la entidad emisora de la quiniela. /Foto: Fito Carreto.
La afortunada había sellado un boleto con ocho apuestas, por el que había pagado 320 pesetas. Josefa, que en la noche del lunes estuvo ajena a la marcha del encuentro entre el Barcelona y el Hércules de Alicante, supo en la mañana del día siguiente que el único acertante de 14 era vecino de El Puerto y que había validado su apuesta en la misma administración en la que lo había hecho ella. Así se lo anunció a su hija Pina, por lo que decidieron pasarse por la oficina de apuestas para comprobar su boleto.
Tras aguardar una pequeña cola, en la que tuvo ocasión de manifestar que esos premios no estaban hechos para ella, la regenta de la administración, Manuela Figuereo, comprobó cómo el ordenador daba como afortunado el boleto, ante la sorpresa de Josefa y la euforia no contenida de quienes en ese momento se encontraban en la pequeña oficina de la plaza de la Herrería.
A partir de ese momento, la mujer, que reaccionó besando a propios y extraños que pasaban por la calle, se convirtió en protagonista de su sueño más deseado: asegurar su bienestar y el de los suyos. Ante los micrófonos de las emisoras de radio y las cámaras de televisión dijo sentirse tranquila, aunque su calma mal disimulada era rota cada vez que uno de sus hijos, conocedores ya de la noticia que había difundido la emisora local, acudían a la administración, sin terminar de creer que a partir del 14 de enero de 1997 se acostarían sabiendo que su futuro económico estaba asegurado.
En la desaparecida frutería de 'El Lati', de celebración. /Foto: Fito Carreto.
De familia sencilla, Josefa es madre de ocho hijos y comparte su vida "con un señor con el que vivo, porque soy viuda”. Preguntada sobre el futuro de sus flamantes 308 millones, reconoció no tener planes concretos, si bien aseguró que habrá reparto familiar y que le haría mucha ilusión tener un campo con gallinas, como el que su familia había tenido cuando era pequeña en su localidad natal, Paterna de Ribera (Cádiz).
Foto: Colección Miguel Sánchez Lobato.
La noticia de la identidad de la agraciada tuvo aún mayor eco en la ciudad cuando se conoció que Josefa es madre de uno de los personajes más populares de El Puerto, ‘el Papi’, conocidísimo vendedor de patatas fritas que cada verano recorre incansable las playas portuenses cargado con un cesto de mimbre en el que porta su mercancía. Ataviado con pantalones y camisa blanca, su imagen, ya tradicional y muy querida por sus vecinos, sería a recuerdo del pasado. Josefa anunciaba que su hijo "abandona el cesto". Pepa falleció el 13 de Enero del 2013.
Josefa dijo que se marcharía a Málaga, donde reside una de sus hijas, teniendo previsto entonces celebrar por todo lo alto su buena fortuna. De esta manera, Josefa, Pepa en su barrio, lograría, al menos temporalmente, zafarse del marcaje de los responsables de entidades bancarias que durante toda la mañana aguardaron a las puertas de la administración de loterías para ofertarle sus servicios. Por algo el recogido hace 20 años --el 14 de enero de 1997-- en El Puerto había sido el premio récord de los aportados por la quiniela durante toda su historia en la provincia de Cádiz. En la Ciudad, aquella semana las oficinas de apuestas tenían asegurado el trabajo, ya que 1997 se estaba revelando como un año generoso. La semana anterior, dos hermanos portuenses lograban, con un pleno al 15,62 millones de pesetas. Los loteros y regentes de oficinas de apuestas pensaban que "nunca hay dos sin tres". /Texto: Francisco José Román.
Buena familia, me alegre mucho de aquello