Juan Ortega Álvaro se ha graduado el pasado sábado 20 de mayo como Master de Derecho Canónico por la Universidad Pontifica de Salamanca. Es Abogado en ejercicio, profesor de Religión Católica, Delegado Diocesano de Enseñanza de Asidonia-Jerez y Miembro de Honor del Movimiento Scout Católico. Está casado con Imanculada Gómez Benítez.
Juan Ortega, en el Aula Francisco Suárez de la universidad salmantina, recibe la graduación en presencia del Decano, Luis García Matamoro.
Juan Ortega estudió en el Colegio de San Luis Gonzaga y Derecho en la Universidad Nacional de Educación a Distancia. Es Bachiller en Teología, estudios que finalizó en 1996. El pasado sábado recibía en la Facultad de Derecho Canónico de la Universidad Pontificia de Salamanca su graduación como Master en Derecho Canónico, Dicha Facultad es una de las más antiguas de la institución académica salmantina.
Parte de la familia acompañó al flamante graduado en Derecho Canónico. Los otros dos hijos del matrimonio no se pudieron desplazar por motivos laborales.
La Facultad de Derecho Canónico de la Universidad Pontificia de Salamanca es una veterana institución docente cuya labor se extendió desde su fundación en 1218 hasta su supresión por el gobierno de la nación en 1852. El 25 de septiembre de 1940, la Santa Sede la erigió de nuevo dentro de la Universidad Pontificia de Salamanca, universidad de la Conferencia Episcopal española. Desde entonces, esta Facultad eclesiástica viene ejerciendo una incesante e intensa tarea docente.
La formación personalizada, en un ámbito académico arraigado y solemne, hace de esta disciplina una referencia en lo que a estudios eclesiásticos se refiere, que ha aportado al nuevo Master una enseñanza de alta calidad y una metodología adaptada a las nuevas tecnologías. Es un complemento a la Licenciatura de Derecho, impartido por docentes e investigadores de alto reconocimiento y prestigio.
MUCHAS FELICIDADES JUAN
Acuerdo plenamente, siempre agradeceré a la Universidad Pontificia de Salamanca, mis estudios de Psicología con un plan pionero en esta carrera, allá por los años setenta. Y felicitaciones al Sr. Ortega.
Un buen hombre, si señor