2.952. Hortensia Renedo Varela. Una de las primera voces femeninas de Radio Puerto, en la década de los 50.

Hortensia Renedo Varela vino al mundo en El Puerto en 1941, año del bombardeo japonés a Pearl Harbour que determinó la entrada en la Segunda Guerra Mundial de los Estados Unidos, o el de la creación de la Red Nacional de Ferrocarriles Españoles, la Renfe, o el del nacimiento, entre otros, del tenor Plácido Domingo, los también cantantes Bob Dylan y Joan Báez, Paul Simon y Art Garfunkel, o el político Julio Anguita. El mismo año en el que se estrenaron Ciudadano Kane de Orson Welles o Dumbo de Walt Disney.

1941.

En 1941 es alcalde de El Puerto un militar que ocupaba el despacho del palacio Municipal desde diciembre de 1939: Manuel Barba Ordóñez. Le relevó en septiembre de 1941 José María Pastor Moreno, por poco tiempo ya que al mes siguiente, en octubre tomará posesión de la alcaldía Fernando C. de Terry y del Cuvillo. El arqueólogo alemán Adolf Schulten visitó el Yacimiento de Doña Blanca, y pensó que podría tratarse del ‘Puerto de Menesteo’; no será hasta 38 años después, 1979, que empezarán las excavaciones sistemáticas dirigidas por el Catedrático Diego Ruiz Mata. Abre el ‘Bar Paquito’, en la plaza de Isaac Peral.

Hipólito Sancho de Sopranis publica su libro «Historia del Puerto de Santa María desde su incorporación a los dominios cristianos en 1257 hasta 1800». Rafael Alberti publica «Entre el clavel y la espada», naciendo su hija Aitana en Puerto de Santa María de los Buenos Aires (Argentina). El Padre Guerrero y el Padre Jorge Loring  ingresan en el noviciado de la Compañía de Jesús de El Puerto. Nacen Fernando Gago García, Matilde Montero García, Francisco Rodríguez Lores. Chemari Gutiérrez Colosía. José Antonio Contreras Merino ‘el Vareta’ o ‘el Coquinero’.

LOS RENEDO

Pero volviendo a nuestra protagonista, su apellido, Renedo, está unido ya inseparablemente a El Puerto de Santa María, pero lo que tal vez muchas personas no sepan es que sus abuelos maternos procedían de Nerva, en la provincia de Huelva, un pueblo minero junto a las Minas de Riotinto. El abuelo Francisco Varela llegó a El Puerto tras varias experiencias laborales. Era tornero-fresador y estuvo en Sevilla, donde nació, después de Etelvina, la segunda de sus tres hijas, Georgina. Francisco Varela llegó luego a Cádiz, después a San Fernando (donde nació su tercera hija, Hortensia), y a Sanlúcar de Barrameda. Cuando se estableció en El Puerto, Hortensia madre tenía 16 años.

Hortensia Varela Moreno, la madre de nuestra protagonista, ya adolescente, estudió en una academia, la Academia Poullet, donde conoció a Domingo Renedo, que fue también su profesor particular y que era doce años mayor que ella. Se enamoraron y se casaron. Domingo Renedo era jerezano. Toda su familia era de Jerez. Se vino a El Puerto, pues su padre había trabajado en varias bodegas como contable.

En la imagen, los hermanos Renedo Varela, en su casa de la calle San Bartolomé.  De izquierda a derecha, Domingo, María Teresa –que vive en Estados Unidos–, Pilar, Javier, Jaime, la madre Hortensia Varela Moreno esposa de Domingo Luis Renedo Fernández, Hortensia, José Ignacio, María del Carmen y Natividad, que vive en Tucson (Arizona, EEUU). Faltan tres hermanos en la fotografía.

Sus padres, Domingo y Hortensia, tuvieron 12 hijos. Ella fue la segunda de la saga. Los padrinos de la pequeña Hortensia Renedo Varela fueron su abuelo paterno, Francisco Renedo, y la abuela materna, Clara Moreno, de los que guarda un vago recuerdo.

El único colegio que conoció fue el de las hermanas Carmelitas de la Caridad, en la calle Pedro Muñoz Seca o Nevería, donde hoy continúan. Allí estuvo hasta el Bachillerato elemental. Luego hizo la reválida en la Academia Poullet e intentó estudiar Magisterio. Pero aunque realizó el ingreso, no continuó porque se puso a trabajar.

En la fotografía el alcalde con varias funcionarias del Ayuntamiento, en una imagen para el recuerdo. De pie, Lourdes Merello. Sentadas, de izquierda a derecha, Hortensia Renedo, Ana María, sobrina de un funcionario apellidado Brotonns, el alcalde Juan Melgarejo Osborne, Ana María Fernández Sanz-Blanco y Asunción Poullet Ramírez.

Primero fue en una oficina de una fábrica de piensos de animales, hasta que se casó en 1967, en la primera parroquia de San Marcos de la plaza del Polvorista, con Faustino Navas Rodríguez, Maestro Nacional, malagueño de nacimiento, que vino destinado a El Puerto procedente de Madrid.

En mayo de 1968, Hortensia Renedo aprobó el examen para ocupar una plaza en el Ayuntamiento de El Puerto para el entonces llamado Servicio Municipalizado de Aguas.

Personal de APEMSA, de izquierda a derecha, Antonio Camacho, Antonio Ramírez, Eduardo Brea, Miguel Baena, y sentadas Asunti Poullet y Hortensia Renedo.

Hortensia siguió trabajando en el servicio de Aguas, convertido ya en empresa municipal, APEMSA, hasta su jubilación en mayo de 2006. En la empresa Apemsa su trabajo fue evolucionando de acuerdo con sus necesidades. Realizó un curso de Secretaria Ejecutiva en Cádiz, en la Diputación. Fue secretaria de dirección, de la gerencia y de los órganos directivos, del Consejo de Administración y de la Junta General de APEMSA hasta su jubilación.

Trabajando, casada y con cuatro hijos, aún teniendo deseo de dedicarse a la enseñanza, hizo el curso de acceso a la Universidad para mayores de 25 años, ya que para cualquier estudio necesitaba el Bachillerato superior. Una vez hecho el curso por la UNED, se matriculó en Pedagogía.

La profesora de música Doña Virginia Hernández, en el centro de la imagen sentada con una niña con abrigo en brazos y un grupo de alumnas en el patio del Convento de Santo Domingo, entonces sede de Bellas Artes, entre las que se encontraba la joven Hortensia. Detrás de la profesora vemos a Merche Macaria. 22 de noviembre de 1953, festividad de Santa Ceclia. /Foto: Colección Vicente González Lechuga.

Sus aficiones desde muy pequeña fueron las derivadas de las clases de solfeo y piano que recibióen  la Academia de Bellas Artes de Santa Cecilia. Asistía a todos los conciertos de piano y estuvo vinculada a los actos que se celebraban, como exposiciones de los alumnos de las distintas actividades que se impartían en la Academia. Hoy sigue deleitando a sus familiares y amigos, de forma íntima, con su talento natural para el piano, que practica en casa.

El Instituto Santo Domingo, sede de la primera Radio Puerto

Su vinculación con el mundo de los medios de comunicación también le llegó muy joven. Con 17 años entró en la emisora de radio, cultural, del entonces Instituto Laboral, a disposición del único locutor que la emisora tuvo desde sus comienzos: José Morillo León, una persona con la que compartió muy buenos momentos y a la que estará siempre muy agradecida por lo que aprendió de él y por lo que influyó en su formación a todos los niveles.

Hortensia Renedo intervino en la zarzuela 'La del Manojo de Rosas'.

A partir de entonces se incorporó a la Asociación Cultural Medusa, haciendo teatro leído, puesta en escena de obras de teatro y otras iniciativas culturales. Siempre se consideró incapaz de hacer algo en público y, sin embargo, era algo que le fascinaba.

Su educación religiosa, muy arraigada desde sus primeros años y que espera conservar hasta su último aliento, le han servido para ver lo bueno que ha habido y hay en las personas de su entorno, así como para aprender de sus errores.

De izquierda a derecha, Rafael Navas Renedo, Diana Andrade, Miguel Navas Lora, Isa Lora, Hortensia Renedo y Faustino Navas, su marido, en la graduación de su nieto Miguel.

Desde su jubilación reparte el tiempo entre su afición a la cocina y la jardinería, el inseparable piano, su compromiso con la vida en comunidad de la parroquia de La Milagrosa, la Adoración Nocturna y los Cursillos de Cristiandad. Y, sobre todo, con su marido Faustino, sus cuatro hijos (Rafa, Bego, Mariví y Mayte), sus siete nietos (Miguel, Clara, Begoña, Felipe, Mateo, Fernando y Paco) y sus yernos Miguel Ángel, Javi y Jóse y su nuera Isa. Para todos ellos es, sencillamente, nada más y nada menos que, como un día la bautizó para siempre el primero de sus nietos, “la abuela Totén”.