Se llama Marcos Gallardo Vallecillos, tiene 36 años y es natural de El Puerto de Santa María y, hasta la semana pasada, su nombre decía poco en el populoso barrio granadino de La Chana. "Vivo en la calle porque quiero", dice sobre su peripecia personal y rehúsa entrar en más detalles. Un indigente que en el Paseo de la Encina de Granada, donde extiende su colchón noche tras noche desde hace medio año para dormir al raso, vivió su noche más amarga. Eran las once de la noche del lunes y atacaba el bocadillo que sería su cena mientras, tumbado en la esquina del parterre que ha convertido en su 'vivienda' escuchaba en la radio un programa de rock. /foto: M.A.Molina.