Don José, en una imagen tomada el 1 de julio de 1994, seis meses antes de su óbito.
José María Rivas Rodríguez nació en Sanlúcar de Barrameda el 1 de julio de 1919. En El Puerto era alcalde Eduardo S. Piury Dagnino. Era el tercer hijo del matrimonio formado por los sanluqueños José y Carmen: Carmen, Joaquina --fallecida de niña--, José María --nuestro protagonista--, Joaquín, Rosa, Lola y Rosario (religiosa). Vivió en la Casa Trillo estudiando en La Salle para, con 11 años, marchar al Seminario de Pilas (Sevilla).
Era una persona muy campechana, amable y extrovertida, que se emocionaba fácilmente y que ayudaba a cuantos podía desde el ejercicio de su ministerio sacerdotal. Pedía a quienes tenían para distribuirlo entre los más necesitados.
De amena conversación en torno a una copa de vino, era una persona que estaba con cuantos le necesitaban y sabía escuchar y atender a cuantos se le acercaban. Tenía un corazón de doble ancho.
Perteneció a una familia humilde que trabajaba en un campito de su propiedad. El padre murió muy joven, quedando los hijos a cargo de la madre quien, con mucho esfuerzo sacó a sus hijos adelante. Dado que José María quería estudiar para sacerdote y su madre no tenía posibilidad de costearle la carrera, por mediación de unos amigos se puso en contacto con los Marqueses del Mérito, de Jerez, quienes fueron los que le costearon los estudios en el seminario. /En la imagen, el cura en una insólita imagen con chaqueta y corbata, en la playa de Sanlúcar de Barrameda.
Los seminaristas, un día de comida campestre. Don José aparece a la izquierda de la imagen.
ORDENACIÓN.
El 26 de mayo de 1945 se ordena sacerdote en Sevilla, celebrando su primera misa en la Colegiata de Jerez, hoy Catedral, siendo apadrinado por la marquesa del Mérito y un sobrino de ésta. Durante un año, mientras le llegaba su primer destino, estuvo de capellán en la Capilla de la Merced, que se encontraba en el palacio de unos familiares de la Duquesa de Medina Sidonia, en Sanlúcar de Barrameda.
El párroco con sus acólitos. A uno le picó una pulga en el momento de disparar la foto [sic], leyenda que aparece al dorso de la imagen tomada en noviembre de 1947 en Espera.
En 1947 lo destinan a Espera (Cádiz), donde ejerció de párroco algo más de tres años. Entonces, sería destinado al Seminario de Sevilla, donde ejerció de profesor durante dos cursos, llegando a seer Superior en 1952.
Don José, profesor en el Seminario Metropolitano de Sevilla con unos seminaristas. El primer seminarista de la izquierda es Ignacio Noguer, que luego sería obispo de Huelva.
Allí tendría como alumnos a sacerdotes que luego serían conocidos: Rafael Bellido Caro, el que fuera primer Obispo de Jerez Asidonia, o los hermanos Ramón y Antonio González Montaño (ver nótulas en GdP)
En una alocución desde un balcón en el municipio sevillano de Herrera.
Entre 1952 y 1957 estuvo destina o en un pequeño municipio sevillano: Herrera, donde, además de párroco ejerció de profesor de Religión en un colegio.
Participando su toma de posesión en El Puerto.
LLEGADA A EL PUERTO.
Tras una oposiciones toma posesión el 3 de julio de 1957 con la plaza de Cura Propio --o plaza de párroco en propiedad-- en la Iglesia de San Joaquín, sucediendo a Manuel Salido Gutiérrez, que pasaría a la iglesia Mayor Prioral. En la casa del Cura vivirá junto a su madre y su hermana Rosa. Su otra hermana, Rosario, religiosa, estuvo destinada en Burdeos y San Sebastián, adonde aprovechaba para ir a verla en vacaciones. Además de atender la parroquia, ejercía de capellán en el Penal y en los conventos del Espíritu Santo, Esclavas y Capuchinas.
El 21 de agosto de 1960. durante la bendición de la Peluquería Mary.
Desde las Capuchinas impulsó la Hermandad del Rocío, de la que a su vez fue capellán durante muchos años. También lo fue del colegio de las Hermanas de San Vicente de Paul o Asilo de Huérfanas, así como de los actos religiosos del colegio La Salle, tales fueron las primeras comuniones de los alumnos. En el templo también asistió a las hermandades de la Flagelación y la Veracruz.
De izquierda a derecha, Manuel Román Ruiloba, coadjutor de la Prioral, Manuel Vargas Dodero, presidente de la Asociación de Padres de Alumnos de La Salle, el reverendo Rivas y el director de La Salle, el Hermano Salvador Juan. Comida de hermandad celebrada el 15 de mayo de 1966.
El 5 de junio de 1970, celebró las Bodas de Plata Sacerdotales. De izquierda a derecha, el coadjutor de San Joaquín, Juan Luis Calvo, el franciscano Eugenio Gómez Carmona quien luego sería coadjutor del Carmen y San Marcos, el Dean de la Catedral de Jerez, Repeto Betes, Don José, Rafael Zambrano, desconocido y el franciscano José María Juez Ahedo.
En El Puerto coincidió con dos paisanos suyos, que también tomarían los hábitos, los presbíteros Rafael Zambrano Pulet y Juan González Lagomazzini.
El 15 de diciembre de 1974 se fundó la primera Comunidad Neocatecumenal en San Joaquín, que aparecen en la fotografía. Esta imagen está tomada 20 años después, el 1 de julio de 1994, en el homenaje que le tributaron las comunidades, a seis meses de su fallecimiento.
CAMINO NEOCATECUMENAL.
A mediados de la década de los setenta, en diciembre de 1974 un grupo de fieles, bajo su dirección espiritual, creó en la parroquia el Camino Neocatecumenal, siendo la primera iglesia en El Puerto en adscribirse a este tipo de comunidades, luego vendrían San Marcos, la Prioral, la Milagrosa, ...
De izquierda a derecha, Don José, el obispo José María Cirarda Lachiondo y el coadjutor, Juan Luis Calvo, en una visita pastoral el 18 de octubre de 1966.
Se preocupó y mucho de las necesidades de los vecinos del Barrio Alto, donde todavía, hoy, le recuerdan con cariño. Organizó un comedor con la ayuda de muchísimos feligreses existente en la calle de la Rosa, en un inmueble que pertenecía a la parroquia, situado a espaldas de ésta.
De izquierda a derecha, Sabas Martín Repollet, Don José y Vicente González Bruzón, camino de Ronda a comprar 'Los Tosantos'. El rengue o 'Viacrucis' lo salpicaban de copas y tapas.
RONDA
Eran muy frecuentes sus viajes a Ronda para visitar a su hermano Joaquín y a la familia, a los que solía ver en verano. No faltaba ningún año que fuera a la ciudad malagueña por la festividad de los ‘Tosantos’ acompañado por sus amigos, los hermanos Francisco y Sebas Manuel Martín Repollet y Vicente González Bruzón.
En la población serrana compartía con los hijos y los nietos de su hermano Joaquín y de Francisca las horas de la tarde en una mesa de ping pong que servía para el juego y que se adaptaba como mesa de lectura. Ahí “el Tate Cura”, así le llamaban en la casa familiar, leía las vísperas mientras los más pequeños garabateaban entretenidos o alguno estudiaba las pendientes del verano. Y es que, aquellos veranos debían pertenecer a su ideario sentimental y parecerle algo entrañable porque los tres últimos meses de su vida decidió pasarlos en Ronda
De izquierda a derecha, Domingo Prieto Cressi, Rafael González Bruzón, Francisco González Rivera, Sabas Manuel Martín Repollet, Francisco Martín Repollet, Don José, José González Narváez y Vicente González Lechuga. Imagen tomada con motivo de las Bodas de Plata Sacerdotales de nuestro protagonista.
AMIGOS.
Se contaban por docenas y es imposible acertar dada la cantidad de amigos con los que contaba, entre ellos Jacinto Cossi Ochoa, Miguel Castro Merello, Rafael y José González Bruzón, Antonio Ruiz de Cortazar, José González Narváez, los hermanos Antonio y Francisco Sánchez Ruiz, Domingo Prieto Cressi, los hermanos Francisco, Vicente y Fernando González Rivera, etc., casi todos asiduos clientes la Bodeguilla de González, del Bar La Perdiz, del Puerto Bar, entre otros, donde le gustaba mucho alternar con los amigos y donde de vez en cuando aprovechaba para “pegar algunos sablazos” para sus pobres de la Parroquia. Sevillista, era muy aficionado al fútbol desde pequeño.
En 1966, en Sanlúcar, con su madre, Carmen, su hermana religiosa Rosario y su otra hermana, Rosa, que lo asistió en su casa de El Puerto, hasta el fallecimiento de ésta.
E1 de julio de 1994, próximo a su retiro y ya enfermo, las comunidades neocatecumenales le ofrecieron un homenaje con motivo de su 75 cumpleaños.
EL FINAL.
En octubre de 1994, debido a una afección pulmonar --fue un gran fumador-- se fue a vivir a Ronda dado que el aire de la serranía le era muy favorable para su enfermedad. Se llevó sus bártulos, ligero de equipaje, y su familia estableció en ese mismo lugar de los veraneos de siempre un pequeño hospital casero para que su enfermedad terminal no lo obligara a vivir fuera de la familia esos últimos meses.
Como recuerda su sobrina María del Carmen: «--Cuando decidió traerse su equipaje y terminar en Ronda en un ambiente familiar, agradable, estaba en un estado casi permanente buen humo,r como él estaba acostumbrado a disfrutar cuando venía».
Don José con su familia.
Y volvió a ser como siempre: el ‘Tate Cura’. Como había hecho siempre, vivió aquel último invierno rodeado de sus sobrinos y su familia de Ronda. Su hermano Joaquín le hacía todos los ‘mandaos’ del mundo y su cuñada Francisca, después de tantos años, sabía a la perfección como tratar a su cuñado para que se sintiera como en su propio hogar.
A eso añadiremos que, prácticamente a diario, iban a verlo todos los amigos que había dejado en El Puerto de Santa María. Eran auténticas peregrinaciones a Ronda de todos aquellos que lo querían. Celebraron misa en alguna ocasión en el mismo lugar en el que vivía a diario
Fallecía el 1 de enero de 1995. El Obispo de Jerez, Rafael Bellido Caro se desplazó el día de su funeral a Ronda para decirle el último adiós con una misa en familia, celebrada en la casa. En el funeral de El Puerto, además del Obispo concelebraron la ceremonia otros 34 sacerdotes, estando junto a Bellido Caro el vicario general de la diócesis, Luis Nuñez Rodríguez, el vicario de pastoral y párroco del Carmen, Ramón González Montaño (ver nótula núm. 232 en GdP), y los diáconos Juan Antonio Villarreal y Antonio Tinajero, el primero de ellos al frente de San Joaquin, desde que el párroco fuera trasladado a Ronda por la enfermedad. El capellán Apellániz en su funeral en el Puerto de Santa María comentó, con palabras muy hermosas, cómo «Don José nos dejó de la mejor manera posible, rodeado de su familia».
En el año 2000, sus restos mortales fueron trasladados a la cripta de la Capilla de San Pedro, en la Iglesia Mayor Prioral, donde reposan los presbíteros que han servido a la iglesia en El Puerto.
Con el capellán de la Ciudad, Anastasio Pérez de Andrés, a la derecha.
ANÉCDOTAS.
Cuando la familia de Rafael Sevilla (ver nótula núm. 1302 en GdP) y la de los Cruz Vélez (ver nótula núm. 771 en GdP) iban algún que otro domingo a Pilas a visitar a sus hijos seminaristas, el padre de los Cruz Vélez llevaba la furgoneta y Don José dejaba a Rafael Sevilla que sacara algún que otro banco de la iglesia que ponía en la furgoneta para que pudieran ir todos sentados. Desde luego si la Benemérita los pillaran ahora con esas medidas de seguridad iban a la cárcel hasta el párroco por prestar los bancos.
Una imagen peculiar del Cura, con el sombrero canoa y manteo, abordando un taxi en Madrid en una visita en los años cincuenta del siglo pasado.
Contada por Antonio Cristo: «Una anécdota de la Perla, fue en busca de Don José, párroco de San Joaquín, para que le diera una manta que pasaba mucho frío y no se encontraba bien. Se pintó la cara con azafrán, para que diera sensación de estar pálida y enferma. El cura, que no tenía nada de tonto, le dijo: «--Perla, veta a casa, te lavas la cara con agua y jabón, y vente a recoger la manta, con la cara limpia, como Dios manda». Don José, era amigo de mi padre, en muchas ocasiones le comentaba: «--Lino, ¿cuando voy tener el placer de verte algún día por la Iglesia?». A lo que mi padre le respondía: «--Don José, con las de visitas que hace mi mujer a la Iglesia, ya reza para toda la familia».
Para la señora Silvia. El de la foto del coche confirmo que es Vicente González Bruzón, mi padre.
en la foto del coche, cuando venian de Ronda, el de la derecha no es Vicente sino José Arcila"el Titi"
A D.Jose lo recuerdo muchísimo, ya que tuvimos mucha relación durante muchos años. Sobre todo en una época que, debido al cierre de la casa de Acción Catolica en Diego Niño, recogió a un grupo, en el que me encontraba yo, en la Parroquia de S.Joaquin. También porque ofició mi boda e incluso nos acompañó en la celebración. Un recuerdo emocionado.
Para José F. González Gómez: Gracias, Pepín, sabía que eran dos jugadores pero no recordaba los nombre de ellos. ¿Sabes quien es el otro? En efecto es en el Campo Eduardo Dato.
Como sobrina nieta de D. José, agradezco la atención demostrada con esta biografia, aunque habéis olvidado en ella a mi madre, su sobrina Rosi, que vivió con él desde los dos años,acompañándolo en todo momento una vez que su hermana y y su madre murieron, ya que ella fue su única familia en el Puerto, antes de pasar los úlimos meses en Ronda junto a su Hermano Joaquín. Gracias por acordaros de él, de un hombre bueno.
Muy amigo de mi padre , nos casó a mi hermna y a mi .Y en los años en que estaba en la Universidad siempre que pasaba por Madrid venia a visitarme al Colegio Mayor.
En la foto que aparece junto a D. Anastasio, que por cierto creo que es en el campo de futbol del Racing "Eduardo Dato", el que está junto a D. José, es el futbolista que jugaba en el Racing Demetrio Berenguer, natural de Puerto Real, que creo que aun vive, el otro es tambien futbolista pero no recuerdo su nombre.
Vicente, lo recuerdo con mucho cariño. El me casó y teniamos una buena amistad.
El cura Don José, 37 años de su vida entre nosotros. ¡¡Gran persona!!
En casa se nos fue un familiar mas que un amigo. D.E.P.
Creo que este señor fue quien me bautizó.
DON JOSE, TANTOS Y TANTO RECUERDOS ME VIENEN A LA MEMORIA QUE HASTA ME EMOCIONO, QUE TIEMPOS, CON GRAN ORGULLO FUI POR MUCHOS AÑOS (CREO QUE DE SIEMPRE,HASTA SU FALLECIMIENTO) PUES ME CRIE EN LA PARROQUIA,SU MONAGUILLO UNO MAS ENTRE TANTOS Y TANTOS CHAVALES QUE POR AQUELLAS FECHAS NO TENIA RECOJIDOS EN LA PARROQUIA PARA QUE NO JUGARAMOS EN LA CALLE (TENED CUIDADO QUE LA CALLE HOY DIA ESTA MUY MALA,NOS DECIA) SIEMPRE NOS CORREJIA Y NOS REGAÑABA CUANDO NO HACIAMOS LAS COSAS BIEN, COMO UN ABUELO ACTUA CON SUS NIETOS. EL MISMO CON ORGULLO CUANDO LLEGABA ALGUN PRESBITERO NUEVO A LA PARROQUIA DECIA ESTO SON MIS MONAGUILLOS, RECUERDO CUANDO UN DOMINGO DESPUES DE MISA DE 12 NO DIJO A TODOS BUENO HOY INVITO YO A COMER A TODOS, Y NOS LLEVO A SANLUCAR DE BDA. RECUERDO QUE NOS LLEVO JOSE LUIS TEJADA (POETA) Y SU HIJO PABLO, NOS ACOMPAÑO EL PADRE PABLO QUE POR ENTONCES ESTABA DE PROFESOR EN SAFA EN BAJO GUIA NOS PUSIMOS TIBIOS DE LANGOSTINOS, QUE RECUERDOS MUCHOS QUE SE ME PASAN POR LA MENTE, NO CABRIAN EN UN LIBRO, NO FUE SIMPLEMENTE UN CURA FUE EL CURA DE MUCHOS NECESITADOS DE MUCHAS FAMILIAS SIN TECHO DE MUCHOS DESAHUCIADOS DE LA VIDA, EL HOMBRO EN EL CUAL MUCHAS PERSONAS ENCOMTRABAN UN ALIENTO, EL CURA " DON" JOSE EL DON SE LO GANO A PECHO, DON JOSE, MI CURA, ESPERO VOLVER A VERTE ALGUN DIA, PERO NO TENGAS PRISA, PUES SEGURO QUE AYI DONDE ESTE TENDRAS UNA LEGIOS DE MONAGUILLOS A TU ALREDEDOR.
Don José, en la foto tomando un taxi en Madrid, con su canoa -- no castoreño, porque castoreño es el sombrero de los picadores y canoa el de los curas-- , y manteo, se parece al Cardenal Segura, en una foto muy similar que corre por ahí. Es que parece hasta en los rasgos de la cara.
EN LA FOTO DE LAS BODAS DE ORO SACERDOTALES, EL "DESCONOCIDO" SEGUNDO POR LA IZQUIERDA, ES EL FRANCISCANO PADRE EUGENIO GÓMEZ CARMONA, QUIEN FUERA COADJUTOR EN LA PARROQUIA DEL CARMEN Y SAN MARCOS.
Y EN LA MISMA FOTO, EL "DESCONOCIDO", A LA DERECHA DE DON JOSÉ RIVAS, ES EL SACERDOTE DON RAFAEL ZAMBRANO, QUIEN FUERA COADJUTOR EN SAN JOAQUÍN.
El seminarista que está a la izquierda, en la fotografía del Seminario de Pilas, con Don José, es el que luego sería Obispo de Huelva, Ignacio Noguer.