Juan Muñoz, en las antiguas puertas de Taquilla de la Plaza de Toros. (Foto: Fito Carreto).
Juan Muñoz Aparicio nació en 1934 en la calle Nevería, 32 --en el lugar que luego estaría ocupado por una fonda--, primer hijo del matrimonio formado por Juan Muñoz Villanueva (+1939) y Luisa Aparicio García (+2000). Su otro hermano, Manolo, con nótula núm. 803 en GdP y su primo el cura Juan Carreto, con nótula núm. 904 en GdP, huérfano de madre al fallecer ésta en el parto sería, prácticamente, el tercer hermano. Falleció el año 2005.
En la imagen, el Batallón Infantil, en formación por las calles de El Puerto en 1934, el año del nacimiento de Juan.
En 1934, el Ayuntamiento estuvo presidido ese año por tres alcaldes, desde junio del año anterior hasta marzo, por Francisco Cossi Ochoa; de marzo a Octubre, por Francisco Tomeu Navarro y, desde octubre hasta enero de 1936 por José Luis Macías Caro, padre de Luis Macías Rubio. El Consistorio, creemos que en el último trimestre del año, acordó que fueran días festivos locales, las festividades religiosas del Corpus, la Virgen del Carmen y la Virgen de los Milagros. Rafael Alberti funda junto a su esposa, María Teresa León, la revista revolucionaria ‘Octubre’ e iniciará una gira por diversos países americanos. Alberti publicará, ese año, ‘Bazar de la Provindencia’ y ‘La farsa de los Reyes Magos, dos farsas revolucionarias’. Agrupaciones carnavalescas de El Puerto participan en el Carnaval de Isla Cristina (Huelva).
El Teatro Principal, cerró sus puertas durante la Semana Santa, de 1934 reabriéndolas el sábado de Gloria, con la película ‘Melodías de Arrabal’, en la que intervenía Carlos Gardel junto a Imperio Argentina.
Manolín y Juan Muñoz Aparicio, en una foto oficial del Colegio de Alfonso Cárdenas.
Pero volviendo a nuestro protagonista, Juan se quedó huérfano de padre muy pronto, con apenas cinco años por lo que su madre, Luisa ‘la del Cosario’, viuda a los 33 años y con otros familiares a su cargo, fue la que sacó adelante a esta familia numerosa y ya, monoparental. Juan vivió una infancia difícil en plena Guerra Civil y posguerra.
El colegio de Alfonso Cárdenas, en la calle Luna, frente al dessaparecido Teatro Principal.
Estudió en el colegio ‘privado’ de Alfonso Cárdenas, en la calle Luna, cursando a continuación Comercio, estudios que abandona pronto para incorporarse al mundo laboral, algo que será una constante para el resto de su vida.
Empezó muy pronto, en el Cosario --mezcla de agencia de transportes, mensajería y gestoría--, situado en la esquina de Nevería con Palacios, frente al Bar Apolo. El Cosario Vda. de Juan Muñoz desaparecería en 1971, con la llegada de las modernas agencias de transportes. Allí laboraban hasta los domingos.
| Antonio Gil y Juan Muñoz en el escritorio de Conservas Sur.
CINCO TRABAJOS A LA VEZ.
Juan llegaría a estar trabajando hasta en cinco sitios simultáneamente: a las seis de la mañana entraba en una bodega. A las ocho, en la desaparecida fábrica de Conservas Sur. A las dieciséis en los desaparecidos Tejidos López, en calle Nevería. A las dieciocho, como representante de Conservas Sur, en Jerez. Y, además, era Subjefe de Taquillas en la Plaza de Toros, bajo las órdenes de Juan Martín Vélez y con Antonio Gil como compañero.
La fábrica de Conservas Sur, con nótula núm. 333 en GdP, recordaba Juan, eran una fábrica de ‘delicatessen’, productos tales como la mermelada de naranja agria de los árboles de las calles de El Puerto, se vendía en el Corte Inglés y en Inglaterra y en Alemania las sardinas en aceite sin piel ni espinas. La Salsa India, o la de Tomate, hubieran triunfado hoy ante los paladares más exigentes.
De pie, de izquierda a derecha, José Arjona González, Juan Muñoz Aparicio, María Isabel Morató Payares, Guillermo Romero Rivas, Francisco Bollullos García, Manuel García Sánchez y Jesús Ruiz. Agachado, desconocido y Antonio Gil González.
PRIMERAS VACACIONES, EN LA MILI.
Las vacaciones las disfrutó, por primera vez, durante el Servicio Militar, con 19 años, en el buque escuela de la Armada Española, Juan Sebastián Elcano, como marinero de reemplazo. Allí engordó 10 kilos durante nueve meses, los que duraron el viaje de instrucción de los guardamarinas. Y las siguientes vacaciones, 21 años después, cuando entró a trabajar en la desaparecida Caja de Ahorros de Cádiz --hoy integrada en Unicaja-- lo que le permitió prescindir de otros trabajos complemenarios. Y es que Juan, si pensaba que más cornadas daba el hambre, nunca permitió, a fuer de trabajar y trabajar, que le cogiera ese toro.
En el desaparecido campo de fútbol ‘Eduardo Dato’. de pie de izquierda a derecha, José Arjona González, Manuel Jurado (trabajaba en la Cruz Campo), Joaquín Camacho Gordillo, Agustín Fernández González, Juan Garcelá, José Antonio Lojo Rodríguez, Manuel García Sánchez, Guillermo Romero Rivas, Antonio Gil González. Agachados: Manuel Jarque "Chicharito", Fernando Arjona González, Carlos Quiñonero Anguiano, Carlos Quevedo Janina, Juan Muñoz Aparicio, desconocido, desconocido. Delante: José Lucas Morillo León, recién salido de una enfermedad por eso no jugó, recibiendo un homenaje de sus compañeros y amigos. (Foto: Fariñas).
Una prolífica vida laboral en la que fue cosechando amistades y conocimientos para sacar adelante, también, a la que sería su abundante prole. Casado con Carmen Rivas Acal, tuvo siete hijos y un agregado viviendo con ellos --siempre le gustaron mucho los niños-- a los que podía ver poco, pero a los que su mujer supo dar una sabia educación para que todos salieran adelante, además de los nueve nietos que les dieron.
De izquierda a derecha, Ramón Bayo, Juan Muñoz, José Luis Tejada, José Antonio Lojo, Andrés Perles y Francisco M. Arniz. Precisamente se trata de la inaguuración de la Exposición de Pinturas de Arniz, en la Caja de Ahorros de Cádiz de la Plaza del Polvorista. (Foto: Colección Francisco M. Arniz Sanz).
En el Salón de Plenos del antiguo Ayuntamiento, en un homenaje a José Luis Feria Fernández, José Luis Galloso, econ motivo de su triunfo en Madrid, como novillero, cuando cortó 4 orejas saliendo por la Puerta Grande. De pié, de izquierda a derecha, José Pérez Lechuga, propietario del Bar 'El Niño' en calle Zarza, Antonio Fernández Galloso, Francisco Ragel, puede ser Juan Luís de los Ríos, José Luís Galloso", Mateo Navarro y Juan Sánchez, picadores y Leopoldo López León, banderillero, formaban parte de la cuadrilla de Galloso y Soriano. Agachados: Antonio Gil González, Juan Muñoz Aparicio y con gafas, Jesús Vela Morillo. 1 de junio de 1971. (Foto: Rafa).
JEFE DE TAQUILLAS.
De su etapa de Jefe de Taquillas de la Plaza de Toros , en la que fue auxiliado por algunos de sus hijos, guardaba muy buenos recuerdos, y otros no tanto, que se fueron con él para siempre a la tumba, como a Juan le gustaba decir. Y muchas amistades. Entre las anécdotas vividas, nos recordaba lo rumboso que era Manuel Benítez ‘el Cordobés’, el desapego al dinero que siempre tuvo para con los más necesitados. Atendía con generosidad a quienes buscaban su ayuda, e incluso a quienes no se la pedían.
Con su mujer, Carmen, en los tendidos d ela Plaza. (Foto: Garpre).
Y otra anécdota vivida junto a Luis Miguel Dominguín. En la década de los sesenta, la esposa de cierto Gobernador Civil le pidió al maestro , mediante recadero, que le firmara un abanico, a lo que este se negó debido al estado de trance torero en el que se encontraba, con el castizo «--Que se meta el abanico en el c***» . Y ni lo firmó, ni fue puesto a disposición de la autoridad tampoco, aunque por mediación de la Vda. de Miguel Castro Merello, lo firmó 15 días más tarde en otra visita a El Puerto.
HOMENAJE PÓSTUMO.
Juan desaparecería prematuramente el 28 de marzo del año 2005. Ese año, en la corrida a caballos de la Feria de Primavera, se guardó un emotivo minuto de silencio, en memoria y recuerdo de quien, durante 57 años trabajó en las taquillas de la Plaza de Toros, los últimos como Jefe de Taquillas, con las diferentes empresas que regentaron el coso taurino.
Descubrimiento del azulejo en el homenaje póstumo a Juan Muñoz, en las taquillas de la Plaza de Toros.
Unos meses después, el 8 de agosto, Juan Muñoz Aparicio recibiría un homenaje póstumo en el bodegón que alberga las taquillas de la Plaza. Fue descubierta una placa realizada en azulejos por Pepita Lena Terry, ante la presencia de su viuda e hijos, los presidentes de la Plaza de entonces, Fernando Gago e Ignacio García de Quirós, y diversos oficios auxiliares de la la Fiesta: veterinarios, médicos, personal de puertas, etc…
Azulejo situado en el bodegón de taquillas de la Plaza de Toros.
SEGUIDILLAS DE LA PLAZA REAL DE TOROS
DE EL PUERTO DE SANTA MARIA
A la buena memoria de Juan Muñoz Aparicio, taquillero mayor de la Plaza Real.
por Luis Suárez Ávila.
¡Toros en El Puerto!
trenes, vapores,
faluchos de la hora,
los breacks, los coches;
y los piqueros,
en caballos cruzados
van caballeros.
Van caballeros,
y en manolas de mulas,
van los toreros.
¡Toros en El Puerto!
Suenan clarines,
que no los tocan hombres:
son serafines.
Arce y Viñas:
¡Que despejen la plaza!
¡Salgan cuadrillas!
¡Salgan cuadrillas!
y detrás, Atalaya
con sus mulillas.
¡Toros en El Puerto!
Arena de oro,
regada con la sangre
de tantos toros.
De toros, toros,
que lidiaron El Lavi
y Paco de Oro.
¡Vaya toreros!
Mazantini y Redondo
y El Chiclanero.
¡Toros en El Puerto!
grita el gentío.
Que torean Guerrita
y Lagartijo.
Toros de Ortega:
seis en un mano a mano
y uno, de prueba.
Seis, de Gallardo,
con un toro de prueba,
en mano a mano.
En una cena en el campo de fútbol en el estadio José del Cuvillo. En primer término podemos ver a Fernando Arjona Cia. 24 de agosto de 1973. (Foto: Rafa).
Juan se lamentaba, en los últimos años de su vida, que en la sociedad actual hubiera «menos altruismo y mas agresividad, menos gente sana. Pero gracias a Dios también hay buena gente que son la esperanza de que el mundo no acaba».
muy amigo de mi familia ..... Luisa la que mejor hacia el gazpacho... recuerdos de la niñez en el puerto.
LOS PUEBLOS QUE HONRAN A SUS VECINOS, SE HONRAN A SI MISMO.
Y más, si estos vecinos son normales y naturales.
Desde que salió Juan Muñoz en esta pagina he estado pensando que poner de mi amigo, tengo tantas vivencias y anécdotas que un día por otro no sabia por donde empezar. Y ahora me decidido por una historia tan poco conocida que creo que ni su familia lo sabe. Vamos a ello.
Cuando el alcalde Manolo Torres deposita en mi la responsabilidad de la plaza de toros, coincide que la empresa que la regentaba LIMECASA abandona y la plaza se queda sin empresarios.
Desde el ayuntamiento no podíamos permitir dejar pasar una temporada sin que se diera espectáculos taurinos.
Acordamos que el ayuntamiento saliera al paso de este problema y se hiciera empresa al igual que estaba Santander y Valencia. Para ello hacía falta una persona entendida de este mundillo y hacerla gerente. Este es el encargo que me dio el alcalde y me puse manos a la obra.
Independientemente que Juan era mi amigo, también sabía que era conocedor de esta materia y por lo tanto me pongo en contacto con él y hablamos sobre el tema.
A Juan le sorprendió esta oferta y me alertó de lo difícil que era introducirse en el mundo de los toros.
Yo lo animé y le dije que merecía la pena correr este riesgo. Quedamos que en unos días me contestaría.
Efectivamente en tres días me vino diciendo que esto era muy difícil y que las perdidas que podía tener el ayuntamiento serian cuantiosas y que él no quería ser responsable de estas perdidas. Y al mismo tiempo dijo que había hablado con Don Diodoro Canorea del tema y estaba dispuesto hacerse cargo de la plaza, y quería una cita con el alcalde para hablar del tema.
Cuando le comunico a alcalde estos comentarios me dice que no recibe a Canorea, (Canorea y Barrilaro le tenían puesta una demanda al ayuntamiento por algo del pasado) yo le insisto y me dice que bueno, que lo reciba yo pero no en el ayuntamiento, esta entrevista se hace en el Patronato de Turismo.
La entrevista con este señor y Juan dura nada y menos, le digo a Canorea: si usted quiere ser empresario de la plaza mañana mismo; vaya al juzgado y retire la demanda. Tardé como media hora en ir al ayuntamiento para comunicarle al alcalde el acuerdo, y mi sorpresa fue que en ese tiempo Canorea retiró la demanda, fue a ver al alcalde y quedaron en redactar el pliego de condiciones para el contrato.
Me pongo en contacto con Don Diodoro y le pregunto que papel va jugar Juan Múñoz. Me dijo: Juan será mi jefe de taquilla y mi hombre de confianza.
Esta anecdota hay muy pocas gentes que la conozca, El alcalde por supuesto y también el gerente del Patronato.
La grandeza de Juan fue que dejó de percibir una cantidad de dinero importante y dejó en manos de entendidos los temas taurinos de El Puerto y al mismo tiempo contribuyó a que el ayuntamiento no corriera con este gasto.
Con este relato, quiero contribuir a que conozcan la sensatez y buenas maneras de las buenas gentes de nuestro pueblo.
Como no podia ser de otra manera,y de acuerdo a los valores que me inculcaron, solo tengo palabras de agradecimiento a las personas que han colaborado en este escrito dedicado a la figura de mi querido padre.El que lo conoció sabia que jamas quiso ningun reconocimiento publico ,porque lo que lo caracterizaba principalmente era la humildad y la discrección.Siento si algunas personas han mal interpretado las palabras que expresaron lo que salia del corazon.De todos, muchisimas gracias Jose Maria por tu afán.
La grandeza de Juan Muñoz Aparicio, como la de tantos y tantos que han desfilado por estas páginas, no se puede constreñir a una nótula en Gente del Puerto. Esto es solo un reflejo de lo que fue su vida, donde hizo amigos en el trabajo --en tantos trabajos--, creó una extensa familia y dejó un buen sabor de boca en cuantos le frecuentaron.
Yo lo conocí y lo traté, tangencialmente, pero me lo crucé en diversas facetas de su vida: compañero en el trabajo de mi padre y hermano; gestor impecable de las taquillas, no solo taurinas, de El Puerto; entusiasta y emprendedor con sus cosas y con las cosas de El Puerto. Un hombre sabio y prudente que trataba con mucha sensibilidad las cuestiones delicadas y con normalidad las cosas triviales, dadas sus diferentes ocupaciones profesionales.
Juan no pertenecía solo a su familia, --la que lo crió y la que creó-- pertenecía a El Puerto pues era un ciudadano que destacó a lo largo de su vida por su saber hacer y entender como hacer bien las cosas, desde donde fuera, por El Puerto. Algo que se va echando en falta, cuando desaparecen personas que como él, eran referentes, eran respetadas y eran sabias como demostraban por su trayectoria.
Efectivamente, como dice su hermano Manolín, esta Redacción de Gente del Puerto intentó, desde hace ya dos años incluir a Juan en esta nómina siempre inconclusa de habitantes y gentes de El Puerto. Es probable que, como decía el propio Juan, ‘lo óptimo es enemigo de lo bueno’ y como tal y por querer recopilar su familia la mayor cantidad de información y documentos gráficos posible sobre su vida, nunca llegaba esa información, ¿acaso por parecer poca o incompleta? No me puedo explicar otra cosa.
El caso es que nos decidimos a ponerlo en esta web, con la información de que disponíamos --una entrevista que le hice el año 2002 para Diario de Cádiz, donde disfruté mucho de su savoir faire- y los datos comunes de su infancia aportados por su hermano Manolín, de cuando le sacamos en esta web, y algo de trabajo de investigación. Las fotografías, de diversa procedencia, --algunas de su hermano--, vinieron a completar una nótula, que bien pudiera ser la primera de otras, pues si escribiéramos de «Juan Muñoz y el planeta de los Toros», seguro tendríamos material para ello.
Estamos satisfechos por ver el reconocimiento y el buen recuerdo y sabor que despierta y deja la figura de Muñoz y, posiblemente, con información de primeras manos hubiera salido una nótula más completa. Pudieron salir otras. Sin embargo esta es la que nos ha salido, de la que estamos satisfechos, porque no ha dejado indiferente de forma positiva a cuantos lectores han tenido la oportunidad de recordar a este gran porteño que fue Juan Muñoz Aparicio, al que recordamos desde aquí y desde el afecto.
José María Morillo.
No me puedo sentir más dichosa de pertenecer a esta familia y de decir que mi abuelo ES Juan Muñoz.
Tuve la suerte de poder disfrutar de su compañía cuando no estaba trabajando. De que pudiera prepararme tan ricos desayunos con tanto amor y esmero cuando me quedaba a dormir en casa. De pasar tardes o noches de verano en el chalet o de ir algún que otro domingo a misa con la abuela.
Pude hacerlo sentir orgulloso hasta el último dia de vida con mis estudios y no había cosa más importante para mi que escuchar un "que alegria Marina,que alegria".
Cuánto me gustaría que me vieras ahora y pudieras decir lo mismo. Pero se que desde algún lado me estás viendo y me acompañas cuando más te necesito.
Siempre confiaste y creiste en mi, y eso no lo olvidaré nunca.
Eres mi ejemplo a seguir.
Te quiero abuelito Muñoz,te quiero con todo mi corazón.
ANTES QUE NADA MI MAS PROFUNDO AGRADECIMIENTO A JOSE MARIA MORILLO Y VICENTE GONZALEZ POR LA INICIATIVA DE SACAR LA PAGINA DE MI QUERIDO HERMANO DONDE HABEIS SABIDO RECONOCER SUS MERITOS, SI TÚ JOSE MARIA HUBIESES CONTADO CON MAS COLABORACION(FAMILIAR) ESTA PAGINA HABRIA SIDO MUCHO MAS COMPLETA, ASI QUE LA QUEJA ....YA ERA HORA.....QUE SE LA DEN A "OTROS U OTRAS" QUE SON LOS CULPABLES DE QUE NO HAYA SALIDO ANTES Y MUCHO MAS COMPLETA, DE TODAS FORMAS COMO NO QUIERO POLEMIZAR, LO MAS IMPORTANTE ESTÁ HECHO Y MUY BIEN, AHORA MUCHAS PERSONAS A TRAVES DE ESTA PAGINA PODRAN SABER Y OTRAS CONFIRMAR LA GRAN PERSONA QUE FUE MI QUERIDO HERMANO
Este hombre era pura educación y amabilidad!!... un privilegiado de los números!!!
Juan Nuñoz, nosotros no teníamos ninguna amistad, pero solo por ser hermano de Manolin, ya para mi, entrabas en mi catalogación como una "BUENA GENTE", y mas aún habiendo tenido como compañero de trabajo a tu yerno Alejandro, cada vez que hablaba de Juan Muñoz te ponía en los altares, como una buena persona, buen padre, buen trabajador y ante todo honradez en todos los aspectos de tu vida.Un saludo a toda la familia.
Mucho se ha tardado en darte cabida en esta página en la que tenías que estar por meritos propios, y por ser un personaje muy respetado, admirado y querido de este tu Puerto.
Tanto se ha tardado, que hasta yo mismo he estado tentado muchas veces en escribir sobre ti, movido por mi admiración particular. Te hubiese descrito y presentado, para hacerte justicia, tal y como eras, un ser humano ejemplar, trabajador fiel e incansable, abnegado y entregado esposo, buen padre y amigo de tus amigos. Hubiese mostrado esa foto en sepia que tienes en el Parque Calderón rodeado orgulloso de tus hijos Juan, Maica, Guillermo, José Antonio, Marilu, Fernando y Rocío, otras en las que te mostrabas dichoso junto a tu siempre amada y hermosa Carmen Rivas o bien aquella, en color, en la que estabais felices y rodeados de joviales nietos revoloteando a vuestro alrededor. Hubiese relatado alguna de las muchas anécdotas y peripecias que me confiaste sobre “el viaje de tu vida” en 1953 a bordo del Juan Sebastián Elcano. Pero sin más lamentaciones, gracias a quien ha tenido el acierto de situarte en el lugar que te corresponde, … entre la gente del Puerto.
Fue en año 1975 cuando pase definitivamente por el umbral de la puerta de tu Casa y allí quede prendido, no solo de la belleza de tu quinta hija, sino por la de toda tu familia, que desde entonces es la mía. Aquella alegría me contagio el alma y quede para siempre enredado en el encanto de tu hogar, mi hogar. Siempre te admiraré querido Juan, y pese a que siempre te tenemos presente, yo te echo mucho de menos.
Papá
Como tu sabes, en estos años que llevo sin tí hemos pasado malos momentos y que afortunadamente estamos superando. Gracias a los consejos que me dabas y sobre todo los ejemplos que me dejaste, aquellos momentos que siendo yo un niño pequeño y dandome cuenta perfectamente de lo que ocurría a mi alrededor,viendote solo, enamoradísimo de tu mujer, mi madre, con una gran carga familiar, con multiples responsabilidades que cumplir con enfermedades familiares que atender, supieste sacarnos siempre para delante, con sacrificio, trabajo, honradez y entrega. Cuando discutíamos, pues nos parecíamos mucho en el caracter, terminabas con una de las frases que más me marcaban de tí "niño Dios nunca me ha abandonado" y esa fé incebrantable, esa forma de ver la vida con esperanza, entrega y amor me ha dado la fuerza para que tu hija politica Alejandra, tu nieta YULIA y yo , hayamos podido salir de estos malos ratos en los que la vida nos a puesto a prueba. Un beso
Tengo muchos recuerdos de mis primos y mi tia luisa pues fueron muchos veranos que pase con ellos me tenian como hija y hermana, mis padres los querian a todos mucho, Muñoz como la mayoria de la gente le llamaban a Juan era un trabajador nato, cuando lo veia por la calle siempre iba corriendo.... SIEMPRE TE RECORDAREMOS
En la fotografia del ayuntamiento, el primero por la izquierda es Josè Pérez Lechuga, tenia el bar EL NIÑO, en calle Zarza, los tres desconocidos son Mateo Navarro y Juan Sanchez, picadores, y Leopodo Lopez León, banderillero, todos de la cuadrilla de J. Luis, el dela fila de abajo con gafas es Jesús Vela, que tambien quiso ser novillero, y el acto fue un homenaje a Jose Luis por su triunfo en Madrid como novillero cuando corto 4 orejas saliendo por la Puerta Grande
Juan Muñoz, ya era hora que aparecieras en estas páginas. Que orgullo pertener a tu gran familia.
Perdí a mi padre con 19 años y que maravilloso espejo fuiste, donde quise reflejarme y todo lo aprendí. Si algo soy, te lo debo a tí.
Dejastes un gran vacío, que intentamos llenar día a día con tu recuerdo.
Donde estés, estarás orgulloso de los que aquí dejastes, porque se nota tu semilla en cada uno de nosotros.
Quiero mucho a esta familia, tu familia, mi familia.
Que orgullo haber tenido la suerte de tenerte como padre¡¡¡¡¡Siempre serás un ejemplo vivo a seguir,porque siempre estarás entre nosotros¡¡¡¡Nuestro valores del deber,fidelidad,del buen hacer,de la honradez,honestidad,y del amor hacia los suyos,lo llevamos por bandera y por ello en muchas ocasiones se nos reconoce como hijos tuyos,lo cual nos llena de orgullo y satisfacción.Ya han pasado unos años y tu presencia sigue viva no solo entre tus hijos sino tambien entre todos los que tanto te admiraron y te quisieron,GENTES de muchos sitios y sobre todo tus GENTES DEL PUERTO¡¡¡¡¡
En la foto del campos de futbol, el segundo que figura que trabajaba en la Cruz del campos es MANUEL JURADO,y el siguiente no es Francisco Bollullos , es JOAQUIN CAMACHO GORDILLO y el desconocido es JUAN GARCELA.-
Tuve la gran suerte de estar trabajar a su lado durante tres decadas. Juan fue un ejemplo a seguir, amigos de sus amigos y sobre todo una gran persona.
Sus hijos están siguiendo sus pasos, claro ejemplo del gran amor que profesaba a su familia.
Carmen, él estará siempre a tu lado
Vivi de pequeña muchas vivencias con esta gran familia, siempre estarán en mi corazón y siempre siempre os recordaré como lo que sois, gente estupenda y generosa que no dudó en abrirme las puertas de su casa y de sus corazones. Un besazo a todos los Muñoz Rivas y familia y en especial a mi Luisa, estés donde estés, que tanto me enseñó en la vida.
Como hijo en estos momentos me siento muy orgulloso de verlo en
esta pagina del puerto, siempre lo llevaré muy dentro de mi corazon
por ser un gran Padre, trabajador, honrado y todo lo que se diga de el
es poco, no hay dia que lo tenga presente, su puro, su café y su disposicion para dar todo a la familia, esta familia que esta coja sin
su presencia. tequise y te querre siempre, ¡ donde estes papa!.
Gracias a quien tuvo la felix idea de ponerlo aqui.