Enrique Bunbury, el que ha sido líder de Héroes del Silencio, ha masterizado un nuevo trabajo en solitario titulado Hellville de Luxe, tal es el nombre del estudio y la vivienda donde vive en El Puerto, el cantante zaragozano.
Enrique Bunbury, lead singer of the band ‘Héroes del Silencio’, originally from Zaragoza, has recorded a new solo album called ‘Hellville de Luxe’, which takes the same name as his Studio and his house where he lives in El Puerto.
El disco, aunque se publica el siete de octubre, tiene ya un aperitivo en la calle: el pasado 15 de septiembre presentó el polémico corto del primer single: 'El hombre que no flaqueará jamás', que titula con uno de los versos más conocidos del poeta madrileño Pedro Casariego Córdoba y que puede visionarse en su web oficial. Antes, el 6 de pasado septiembre inició en la Feria de Muestras de Zaragoza su gira: Helville de Luxe.
Bunbury, había dejado en suspenso temporalmente sus proyectos musicales para centrarse en la vuelta a los escenarios de su antigua banda, Héroes del Silencio. La multitudinaria gira del grupo recorrió parte de Latinoamérica y España durante el año pasado haciendo las delicias de todos los nostálgicos del mítico grupo. Con ellos estuvo de gira, en plan Dircom, nuestra amiga y enamorada también de El Puerto, la zaragozana Chon Durán, presidenta de los Operadores Profesionales de Congresos de España (OPC).
Helville de Luxe se publica en tres formatos: un CD con once temas, un doble vinilo con quince y una versión digital para I-Tunes con doce canciones.
El segundo single de Hellville de Luxe es Hay muy poca gente. Con un videoclip dirigido por Cristian Pozo, con tecnología Slow Motion para mostrar al detalle la dureza de cada uno de los 46 golpes que, en un impactante primer plano, reciben a lo largo del vídeo desde Enrique Bunbury a sus músicos, pasando por otros personajes que representan a la sociedad actual: mánagers, ejecutivos, periodistas, fotógrafos, amas de casa, extremistas, políticos... Todos son golpeados con sus propias armas para construir este sarcasmo visual acerca de los momentos que vivimos. "Me gustaría poder girar como un carrusel, o seguir la corriente y cruzar el puente de la incomunicación, y saludar desde el balcón sonriendo como los artistas en las revistas del corazón", canta Bunbury, "Me gustaría continuar una saga milenaria, pero formo parte de una generación espontánea que se defiende mejor en el cara a cara, en el cuerpo a cuerpo, y tiempo al tiempo es tarde ya para cambiar".