EL PAPI, GENUINA NATURALIDAD. F. Pérez Monguió. EL PAÍS. 15.07.1998 Foto BN: Colección de V.G.L. Foto Color: Carlos Pumar Algaba.
Entre 12 y 14 kilómetros diarios a pie para vender 400 bolsas de patatas fritas. Calor y arena son los factores que se dejan sentir en el sudor de su cara y en sus curtidos pies. El vestuario -pantalón y camisa de blanco inmaculado- contrasta con su tez morena por el efecto prolongado del sol y casi lo confunden a lo lejos con un personaje de la jet marbellí o un turista de Miami, de no ser por su gorrito y su fiel aliado, el canasto, que paulatinamente va despojándose del peso inicial de 15 kilogramos que suman los más de 250 paquetes de patatas. Así hasta que, vacío, si las fuerzas acompañan y la demanda lo requiere, recoge un nuevo canasto y comienza de nuevo. "Es lo que mejor sé hacer", asegura Rafael Pérez Sánchez, de 51 años, conocido como El Papi -del Puerto, para los más chovinistas- después de 40 años desde que por la década de los 60 comenzase a desfilar por el litoral portuense para ganar 6 reales por paquete. Ahora cobra 100 pesetas y llega a recaudar más de 30.000 diarias; limpias, se quedan en menos de la mitad. Sin embargo, el dinero que antes fue materia de subsistencia, ahora no parece ser objeto de su preocupación, sobre todo después de que a su madre le bendijese el año pasado la diosa fortuna con más de 300 millones sus muchas horas de trabajo para sacar adelante a ocho hijos. Una cantidad de dinero de la que El Papi reconoce ser partícipe. Así las cosas, todos los indicios situaban a este hombre en una vida más placentera y ociosa, que él mismo ha descartado porque asegura que prefiere la relación diaria con la gente de este club a la que considera su "segunda familia", y porque "yo sin mi Buzo, me muero".
Su territorio transcurre por La Calita, el puerto deportivo de Puerto Sherry para terminar en Vistahermosa, donde se levanta el Club El Buzo. Una zona de contrastes donde todavía a finales del siglo XX se sigue defendiendo el elitismo y las diferencias sociales, y en la que este personaje llano, ha sabido hacerse un hueco en el paisaje de una playa que durante muchos años fue propiedad privada de la familia Osborne. En su playa, el Papi mantiene el espíritu de sus orígenes con un grito de guerra popular que sacó para suscitar la atención del comprador a raíz de la aparición de algunos imitadores. "El Papi, el auténtico, el genuino, el único", aunque demuestra, por otra parte, un culto a la educación y a las buenas maneras: "Lo que usted disponga, cuando usted lo quiera". Sólo abandona este espíritu servicial cuando trata con los más pequeños que en ocasiones parecen ser amigos de pandilla . Decenas de niños se le acercan y lo primero que le piden es un beso que corresponde de inmediato con una cara que hipnotiza. Pero no sólo los pibes le quieren. Los mayores le respetan y le han dado la exclusividad al comprarle únicamente a él las crujientes patatas fritas de Jerez. Tanta es la admiración que despierta que incluso hace unos años se extendió un bulo por la playa y el club de que el Papi había muerto y en tan solo dos horas se recaudó dinero para hacerle un busto de bronce. "Aquí me quieren mucho y me tratan muy bien", asegura después de que un socio le haya invitado a una cerveza. No oculta que cada año le cuesta más cumplir con su sufrida labor. Con todo, se confiesa fiel a sus principios y asegura que no dejará de hacerlo: "Sueño con morirme en la playa con mi canasto y con la gente pidiéndome patatas".
«Que alegría de verano, que todo el verde lo seca». "El Papi" por Antonio Burgos.
Le faltó decir, que los paquetes los llenaban unas niñas, que se perdían todo el verano entero y que también pasaban muchísima calor , junto a su padre, Rafael Gómez Lanzarote y Maria Cortés Montes.
El papi,yo de alguna forma soy parte de su vida,pues mi padre,Rafael Gómez Lanzarote,fue su fundador y antes fue mi abuela Pepa,toda mi familia con muchas horas de trabajo,éramos los que hacían esos paquetes de patatas,yo crecí al lado del Papi y lo queríamos y lo seguimos queriendo y nos acordamos mucho de él,esos años siempre lo llevaré en mi corazón,El parque Calderón el llamado quiosco del papi
buena persona ,gran hombre y enamorado de su trabajo
tengo el placer de conocerlo muy bien y de llevarlo en la furgoneta desde su casa a la playa cargada de cajas de patatas .
un gran saludo
JUAN JOSE ROMAN
patatas bonilla
Efectivamente, mi padre era ese señor tan habilidoso al que usted se refiere. Mis hermanos y yo lo recordamos haciendo en casa, después de su jornada laboral en Terry, todo tipo de cosas: marquetetería, pintura, papiroflexia, relojes de mesa con incrustaciones de metal, belenes con todo tipo de artilugios, pergaminos, revelado de fotos, planos..., de mi padre es el plano del Puerto que viene dentro del libro "El Puerto de Santa María en la Literatura", de Manuel Martínez Alfonso.
Muchas gracias por enviarme este recuerdo, él se lo merecía.
PARA INMACULADA AMENEIRO
Supongo Inma que té debes ser hija de Francisco Ameneiro Lucuix (q.e.d.), si es así, permiteme que haga un modesto recordatorio de tú padre, si no es así, escrito queda.
Conocí a tú padre en un taller de encuadernación que hubo en calle Pagador, justo junto donde vive actualmente María de los Reyes Romero Laffite, cuyo priopietario era Manuel Nieto.
Éste taller se dedicaba de manera generalizada aparte de labores propias de encuadernar, a fabricar estuches para botellines y botellas de licor que se producían en esta zona y Paco era el encargado de diseñar los prototipos y tengo que decir que era un verdadero artista en este sentido, pues no había encargo que no fuera capaz de acometer.
Años despueès le encargué una vez un pergamino con el origen del apellido Bollullo, que conservo con gran cariño, y presumo ante los amigos que el pergamino es obra del artista F. Ameneiro.
Después me hizo algunos relojes y cajitas con incrustaciones de naranjo que conservo que conservo con orgullo.
Existe en El Puerto, muchas personas a las que tú padre les hizo estas piezas, que son únicas por lo laboriosa que eran su ejecución y desde este medio quiero de alguna forma mencionar a una persona que a mí me impactó por su gran habilidad.
Un recuerdo emocionado para Francisco Ameneiro Lucuix
Hace unos días entré en La Diana, excelente ultramarinos, por la calidad de sus productos y por la calidad humana de su dueño, y estaba allí El Papi echando un ratito. Al saludarlo yo al entrar, me dijo que él conocía a mi padre, Francisco Ameneiro, fallecido hace unos años y que se acordaba de cuando nosotros vivíamos en la Ribera, al lado del Economato de Terry. Me dió detalles de mí de cuando era pequeña y de mis hermanos Carlos y Javier. De los bares donde veíamos la tele, eran los años 60, del puesto de verduras de Mariquita Cortés..., en fin una memoria enorme.
Me hizo ilusión que Rafael, al que siempre he saludado por entrañable , me conozca y a partir de ahora me llame por mi nombre.
Inma
manuel sanchez, por jose luis no me conocerias, a lo mejor por Pepito el chico queme llamaban asi para distinguirme de otro pepe mayor que yo, a la maestra carmen de la calle san bartolome tambien la conocia, pero no es esa era otra que habitaba en la calle alquiladores no.1, me gustaria a mi tambien hablar contigo, mi direccion es jllopezfernandez@hotmail.com, saludos.
jose Luis,por tu nombre no recuerdo conocerte,pero como me menciona a Carmen la maestra,pues no se si te refieres al colegio de la calle San Bartolome,que la hija que tu menciona me parece que era cojita.Yo estuve en ese colegio cuando tenia tres o cuatro años .Me gustaria siguieramos comunicandonos,por si llegaramos a reconocernos.Hasta entonces un saludo
En la "amiga" de la calle alquiladores conocí a Rafael (el papi), era un niño inquieto al que no le salian las caligrafias y se ponia perdido de tinta, Carmen la maestra que recuerdo tenia una hija que tocaba muy bien el piano, era una excelente educadora, teniamos muy pcos años, 6 ó 7 a los sumo, me gustaria encontrar a compañeros de la época, otro fue Jaime el pecoso que lleva el coche de caballos, que tiempos...que nostalgia, ojalá apareciera alguien que los recordara, saludos desde Alicante donde vivo desde hace ya 40 años, pero son muchos los recuerdos que conservo de mi infancia y adolescencia que otro dia sacaré.
El Papi, es hijo de “la negrita”, personaje que aparece en la Arboleda Perdida
El poeta universal se refiere en varias ocasiones a “la negrita” por quién sentía gran afecto y admiración.
Por este apelativo cariñoso de “la negrita”, son conocidos también sus hijos, entre ellos, Rafael Pérez Sánchez, El Papi.
Rafael los sesentones de la Ribera estaremos siempre contigo, admirando tu trabajo y esfuerzo por nuestras playas. Los de la Rinconá tambien te queremos y te admiramos.
Respecto al artículo de Fernando P.M. es genial, como el propio personaje, un poco apagado en estos útimos años por cierto. Luis Suarez debe tener varios de este estilo -recuerdo, por ejemplo, uno a Candelaria, la vendedora de antiguedades, y otro muy interesante tambien, creo que de Manolo Pacheco sobre Cándida. Y "La Guachi", "El Chusco", etc... tienen, seguro, sus pequeñas editoriales. Reunirlos y publicarlos en un librito multiautor sería un acierto.
Es uno de los símbolos nostálgicos de mi infancia.
El, con su cesta de bolsas de patatas, sus gritos marketininanos y su continua paseo de una playa a otra han echo historia en muchos de los entonces niños del puerto y sobre todo, parte de un paisaje del que casi ahora se avergüenzan propios y extraños.
Al aparecer en nuestras arenas playeras El Papi, Las zodiac de la Cruz Roja, Manolo con sus Patines en la Puntilla y "los curriplayas" y entonces, solo entonces comenzaba el verano de verdad.
Salu2 desde otro este puerto de ahora!
Queji2 > Mas ke un pesimista, un optimista con información!